El gobierno vigués mantiene el plan general pese al rechazo de los vecinos

El plan general de urbanismo de Vigo está cerrado y el gobierno lo presentará para su aprobación por el pleno municipal el próximo 20 de diciembre, según el calendario de tramitación que presentó ayer la concejala de Urbanismo, Carmela Silva, tras entrevistarse con la presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, Elena González, para conocer los motivos de rechazo de este colectivo. "No sabemos por qué se oponen", afirmó la concejala.

La federación vecinal comunicó su rechazo al plan el martes a través del nacionalista Santiago Domínguez, teniente de alcalde en la coalición viguesa. Durante la fase de introducción de la reserva del 40% suelo para vivienda protegida (hasta el 15 de noviembre), Elena González fue una de las voces más insistentes en reclamar la "aprobación ya" del plan, junto con la asociación de promotores (Aproin), para cumplir el compromiso de hacerlo en este año. "Desde el 15 de noviembre, el mensaje de premura lo han cambiado por el de la inseguridad jurídica del plan, pero no lo avalan con nada: están engañando a los vecinos", dijo ayer Silva.

"Ni análisis económico-financiero, ni informe jurídico ni nada. La presidenta [Elena González] únicamente me dice que es lo que le han contado", añadió la concejala. Sólo Aproin y el colectivo vecinal han expresado, "con los mismos argumentos", su preocupación por la inseguridad jurídica del plan en las reuniones que los responsables del Urbanismo de Vigo vienen manteniendo con los colectivos, económicos y sociales, que integran el Consello Sectorial de Urbanismo y que el próximo miércoles recibirán el documento completo para que se pronuncien el día 11 siguiente.

"Nosotros disponemos de tres informes contundentes que garantizan la seguridad jurídica del plan", contrapuso Silva. Son el de los técnicos de la propia Xerencia de Urbanismo, el del experto Luciano Parejo y el de Consultora Galega, redactora del plan, que actualiza el estudio financiero de los mismos autores que ya lo hicieron en 2003 y 2005, "y si antes les parecía estupendo, no entiendo por qué ahora ya no".

Tanto Aproin como la federación vecinal actúan "con mala fe o ignorancia" y no pueden pretender, añadió la concejala, identificar al conjunto de los ciudadanos "con vendedores o especuladores de suelo" porque "sería gravísimo". La ciudad está perdiendo vecinos por falta de vivienda y el plan trata de atajarlo. "Que alguien me demuestre que los ciudadanos de Vigo no quieren comprar vivienda a precios razonables o que se me diga un sólo ámbito del plan general que no es rentable", retó Silva.

Después de los cambios solicitados por el BNG en nueve ámbitos, la semana pasada, nadie ha planteado ningún otro. El PP se queja de oscurantismo, pero Silva asegura que nunca antes hubo mayor transparencia. El gobierno seguirá tratando de obtener un respaldo unánime al documento ya cerrado, pero sin frenar el calendario de tramitación previsto, que además del Consello Sectorial tendrá que pasar por la Xerencia de Urbanismo y Xunta de Goberno, antes de llegar al pleno el día 20, para salir ese mismo día para la Consellería de Política Territorial.