Un 28,6% de valencianos cree que el puerto tiene que ampliarse

El puerto de Valencia presentó ayer una encuesta según la cual el 92% de los ciudadanos ve la infraestructura como "un importante motor económico para la ciudad". Un porcentaje ligeramente inferior al de quienes lo consideran "muy beneficioso". El sondeo pedía también a los encuestados que dijeran "las principales acciones" que el puerto necesita "para seguir generando riqueza". Un 29%, según el estudio encargado por la Autoridad Portuaria, respondió una "mayor coordinación entre las administraciones públicas". Mientras que algo menos, un 28,6%, se inclinó por la ampliación de las instalaciones.

La encuesta fue elaborada por la Universitat de València, la respondieron 900 personas y se enmarca dentro del proyecto sobre el Sistema de Integración Medioambiental de Puertos y Ciudades (Simpyc). Una iniciativa que cuenta con la cobertura del programa Life de la Unión Europea y que trata de acercar posturas entre las necesidades de las infraestructuras portuarias y las necesidades de los habitantes de los núcleos urbanos que las acogen. La Autoridad Portuaria lidera el Simpyc, en el que se encuentran integrados también los puertos de Toulon, en Francia, y Livorno, en Italia.

Solucionar problemas

Valencia acoge hoy y el viernes unas jornadas sobre el proyecto. Este tiene como finalidad "buscar soluciones a algunos problemas que se derivan de las relaciones puerto-ciudad", coordinando actuaciones entre puertos y Ayuntamientos, "buscando un desarrollo urbano sostenible que contribuya a establecer una convivencia funcional-ambiental más armónica entre el puerto y la ciudad".

La mayor controversia con la que la Autoridad Portuaria debe lidiar ahora es precisamente su macroampliación. Un plan apoyado desde el principio por el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat, que consiguió en verano autorización del Ministerio de Medio Ambiente, por medio de su informe de impacto ambiental, pero que se ha encontrado con un problema sobrevenido.

La victoria del Alinghi en la Copa del América desembocó en un nuevo acuerdo con el equipo suizo y las Administraciones para que la ciudad repita como sede de la próxima edición. ACM, la sociedad organizadora puso como condición importantes restricciones a la ampliación que fueron aceptadas por los tres gobiernos implicados.