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Los retos de la seguridad en la globalización, a debate en Barcelona

La prevención de los extremismos a través de la diplomacia. La búsqueda de la seguridad en un mundo donde proliferan los conflictos. Las desigualdades de riqueza y de género. El incremento de las migraciones. Los desafíos del siglo XXI son muchos y para abordarlos el diálogo es esencial. De ello está convencida Casa Asia, organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores con sede en Barcelona, que ha convocado en la capital catalana a destacados académicos, intelectuales y políticos de todo el mundo para abordar, en el marco del cuarto Diálogo Oriente-Occidente, los retos de la seguridad humana en la era de la globalización.

Jorge Sampaio, alto representante del Secretario General de las Naciones Unidas para la Alianza de Civilizaciones y ex presidente de Portugal, abrió ayer, en el Saló de Cent del Ayuntamiento de Barcelona, el diálogo con un discurso en el que defendió "la diplomacia preventiva" para luchar contra "los extremismos" en los conflictos que enfrentan a la sociedad occidental y la islámica tras el 11-S. Para Sampaio, la Alianza de Civilizaciones, que el próximo enero celebrará en Madrid un foro de debate, debe trabajar para buscar "puntos de encuentro que contribuyan a rebajar la polarización entre culturas". Y defendió la seguridad como concepto opuesto a la escalada militar.

En el primero de los dos días que dura el Diálogo Oriente-Occidente -inaugurado bajo la presidencia del alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, y con la asistencia del presidente de la Generalitat, José Montilla, y el director general de Política Exterior, Rafael Dezcallar- quedó claro que la seguridad será uno de los grandes retos del siglo XXI, un siglo en el que las guerras ya no son exteriores, entre países, sino interiores, entre ciudadanos de un mismo Estado.

Mujeres por la paz

Conflictos en los que la mujer es objeto de violencia y utilizada como "agente de cambio", en palabras de Attiya Inayatullah, miembro del parlamento paquistaní, ex ministra de su país y presidenta del comité ejecutivo de la Unesco. Attiya defendió la "gran motivación y el poder que tienen las mujeres" para defender y salvaguardar la paz en la apasionada y vibrante mesa de debate que protagonizó en la tarde de ayer junto a la ex ministra de Defensa de Finlandia, Elisabeth Rehn; la embajadora de Uganda en la Unesco, Elizabeth Paula Napeyok, y la presidenta de la Fundación Internacional Olof Palme, Anna Balletbò. Las cuatro alzaron firme su voz contra la desigualdad de género y en defensa del papel que la mujer puede tener en los procesos de paz en el mundo.

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