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Reportaje:

Renault se retrata

La escudería francesa obtuvo información confidencial de McLaren, pero niega haberla utilizado

La fórmula 1 continúa sumida en una pesadilla. La temporada concluyó en Brasil el pasado 21 de octubre, pero los escándalos no cesan. El último, de nuevo un turbio asunto de presunto espionaje, amenaza cada vez con mayor fuerza a la escudería Renault, una de las más serias candidatas, junto a Red Bull, a contratar a Fernando Alonso. La cuestión tiene miga. El equipo que dirige Flavio Briatore reconoce haber tenido acceso a datos de la escudería McLaren Mercedes a través de un ingeniero tránsfuga.

Phil Mackereth es el hombre en cuestión. Renault admite que aportó datos de McLaren que fueron vistos por otros operarios, pero, a través de un comunicado, afirma que dichos datos "no fueron utilizados en ningún caso para inspirar la concepción del monoplaza de Renault". Lo que es un hecho es que el espionaje, si lo hubo, no dio ningún fruto porque la escudería, bicampeona con Alonso los dos años anteriores, quedó esta vez muy lejos de McLaren, de Ferrari y hasta de BMW y sus pilotos concluyeron en posiciones mediocres: séptimo Heiki Kovalainen y octavo Giancarlo Fisichella, con un solo podio en todo el curso, el segundo puesto del finlandés en Japón.

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La marca del rombo, un día después haber sido convocada por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para que responda sobre el presunto espionaje el próximo 6 de diciembre, pormenoriza que valoró la experiencia y la competencia de Mackereth y lo incorporó en septiembre de 2006 procedente de su rival anglo-alemana. "Trajo con él informaciones propiedad de McLaren, entre ellas copias de diseños de ingeniería y ficheros técnicos", indica. Los ficheros, almacenados en disquetes informáticos, fueron introducidos en los sistemas de la escudería francesa. En cuanto tuvo conocimiento de los hechos, Renault suspendió de sus funciones a Mackereth, informó a McLaren y a la FIA y abrió una investigación interna. Así comprobó que el ingeniero tránsfuga había informado a varios colegas de los datos que tenía de McLaren a través de diseños del interior del depósito de combustible, la caja de cambios, un compensador de masas y un sistema de amortiguación de suspensión, según admite Renault.

"Los ingenieros implicados afirmaron que, tras haber visto brevemente los diseños, ninguna de esas informaciones fue utilizada para inspirar la concepción del monoplaza de Renault en ninguna de sus formas", añade la escudería. El compensador de masas "carecía de interés" desde que fue prohibido por la FIA y recuerda que el sistema de suspensión de McLaren fue objeto de una "aclaración" por parte de ese organismo.

La marca francesa dice haber colaborado con McLaren y con la FIA: "Hasta el punto de invitar a un organismo independiente elegido por McLaren con el fin de inspeccionar sus sistemas informáticos, sus coches y sus informes de concepción para demostrar que se trataba de un incidente desafortunado sin ninguna influencia en el diseño de sus monoplazas". El caso, salvando las diferencias, se asemeja al del espionaje denunciado por Ferrari, que concluyó con una sanción a McLaren de 70 millones y su exclusión del Mundial de constructores de 2007.

El marasmo en la F-1 se acentúa porque el 15 de noviembre la FIA debe decidir sobre la reclamación de McLaren referente a la temperatura del combustible de los BMW, Williams y Renault en el Gran Premio de Brasil, el último del curso y en el que se produjo el desenlace en la lucha por el título. De la decisión de la federación internacional depende el resultado del campeonato, que acabó ganando el finlandés Kimi Raikkonen, de Ferrari. Caso de que la FIA descalificara a los pilotos de las tres escuderías en cuestión, la corona pasaría a manos del británico Lewis Hamilton, de McLaren.

Alonso, mientras deshoja la margarita del equipo en el que estará el año próximo, trata de mirar hacia adelante: "He aprendido algunas lecciones y el año que viene volveré a intentarlo. Cuando un piloto pierde un campeonato, piensa por qué lo ha perdido. El futuro es el lugar en el que puedes cambiar las cosas y el futuro ya ha empezado".

Técnicos de Renault revisan uno de sus monoplazas en el pasado Gran Premio de España.
Técnicos de Renault revisan uno de sus monoplazas en el pasado Gran Premio de España.RICARDO GUTIÉRREZ

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