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Málaga asocia suelo público a parcelas privadas para aumentar su edificabilidad

Fernando J. Pérez

El Ayuntamiento de Málaga, gobernado por el Partido Popular, ha desarrollado un sistema de ingeniería urbanística que ha permitido aumentar el aprovechamiento de las parcelas de al menos tres empresas privadas. El método consiste en computar junto al suelo de titularidad privada calles y zonas públicas adyacentes, de forma que se genere una nueva área de reparto con mayor superficie. Esto permite construir a mayor altura respetando al mismo tiempo los límites de edificabilidad máximos fijados por la Junta de Andalucía.

El ejemplo más claro de este "urbanismo creativo", como lo denomina el viceportavoz del grupo municipal socialista, Enrique Salvo, se encuentra en los suelos que actualmente ocupa el concesionario de Volkswagen, en la Carretera de Cádiz, el distrito más densamente poblado de la ciudad. En este caso, el Ayuntamiento firmó un convenio con Málaga Wagen por el que a cambio de 2,65 millones de euros, el municipio recalificaba como urbanizable el suelo de los talleres y el concesionario, unos establecimientos industriales que el consistorio considera "inadecuados en el entramado residencial" predominante en la zona. La empresa deberá buscar un nuevo emplazamiento en la ciudad, pero, mientras tanto, sus dueños podrán levantar en el solar una torre de 16 plantas y un zócalo comercial de cinco junto a otros dos edificios que sólo tienen ocho alturas.

El mecanismo para aumentar la edificabilidad ha sido el siguiente: Málaga Wagen aporta un suelo de 4.102 y el Ayuntamiento ofrece un suelo público asociado de 5.383 metros cuadrados, de modo que el área de reparto es de 9.485 metros cuadrados, de los que el 58% son públicos. Entre los elementos públicos que se computan para poder construir más plantas están una rotonda, las calles paralelas al concesionario y la acera frente a la entrada del establecimiento, donde en el futuro se construirá una estación de metro.

Rascacielos de Repsol

Situaciones similares, aunque con cesiones menores, se han producido en los terrenos de los antiguos depósitos de Repsol, donde se van a construir un rascacielos de 44 plantas y otras tres torres de 28, 26 y 14 plantas, y en las antiguas instalaciones industriales de Telefónica en la zona de Martiricos, donde se podrán construir hasta 674 viviendas, según el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

El PSOE, que ha impugnado el convenio de Málaga Wagen ante la Junta de Andalucía, considera que se "producirá una densificación superlativa de zonas ya muy pobladas". Por su parte, el Ayuntamiento aclara que no cede edificabilidad de su propiedad para aumentársela a las empresas y explica que al equipo redactor del PGOU estas actuaciones les parecen "justas y acertadas, al considerar la existencia de un equilibrio entre los intereses de viabilidad económica de la empresa, los intereses de renovación del lugar y las necesidades de reurbanización de la zona".

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Sobre la firma

Fernando J. Pérez
Es redactor y editor en la sección de España, con especialización en tribunales. Desde 2006 trabaja en EL PAÍS, primero en la delegación de Málaga y, desde 2013, en la redacción central. Es licenciado en Traducción y en Comunicación Audiovisual, y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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