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Crítica:SIGNOS
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

En la capital del imperio otomano

"¡Queremos que Marco encuentre a su mamá o, si no, mañana huelga general!", gritaban muchos mozos españoles, medio borrachos, en las fiestas de 1977. Y es que la serie de dibujos animados del niño Marco, que buscaba a su madre de los Apeninos a los Andes, mantenía a millones de españoles atrapados por la televisión en la misma época en que volvían a votar tras décadas de dictadura. La historia de Marco formaba parte de Corazón (1886), un libro para niños del escritor italiano Edmundo de Amicis (Oneglia, 1846-Bordighera, 1908), que supuso un fulminante éxito tras su publicación y se convirtió en una de las obras más leídas en el mundo. El libro buscaba inculcar en los más jóvenes el amor a la familia y a la patria a través de historias llenas de sentimiento.

CONSTANTINOPLA

Edmundo de Amicis

Editorial Almed

422 páginas. 23 euros

Pero Edmundo de Amicis no sólo fue el autor de Corazón. Fue un periodista cuyas crónicas como corresponsal sustentaron libros como España (1872) y Marruecos (1876). Su apoyo al socialismo y sus ideas humanistas pueden verse en Cuestión social (1894). Tras sus viajes por Europa y Marruecos, De Amicis recaló en Constantinopla, una ciudad que vivía entonces cambios fundamentales en su fisonomía y sus costumbres. El escritor italiano visitó los lugares históricos y los barrios más pobres. También habló con los poderosos y los humildes de la capital de un imperio que jugó un papel decisivo en la historia de la humanidad.

De Amicis se movió como pez en el agua por una ciudad repleta de evocaciones históricas, de símbolos y de rincones que espoleaban el ímpetu de un hombre marcado por la cultura y la curiosidad. De su experiencia salió el libro Constantinopla, que fue publicado en 1878 y que la editorial granadina Almed acaba de reeditar. Ya han pasado casi 130 años desde que De Amicis mostrara a sus lectores su visión de la capital del imperio otomano y el libro mantiene vivo su interés. Las palabras del escritor Umberto Eco son significativas: "Cuando fui a Estambul llevé conmigo el texto de De Amicis. Pues él había visto lo que yo no podía". El novelista turco Orhan Pamuk, Premio Nobel de 2006, también ha elogiado el libro de De Amicis.

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