Rijkaard, contra su talón de Aquiles
El Barça, que pierde el doble de puntos fuera que en el Camp Nou, visita al Levante, el colista
La impaciencia crece rápido en el Camp Nou. Si el equipo no es capaz de ganar un par de partidos fuera, se dispara la zozobra. Sucedió en el inicio de Liga. El Barcelona no convenció de buenas a primeras, especialmente en sus dos primeros desplazamientos, en los que cosechó sendos empates a cero frente a Racing y Osasuna. Exigido por los nombres y la calidad de la plantilla, el aficionado dedicó algún que otro silbido al equipo al tiempo que parte de la prensa y del entorno se ensañó con el técnico Frank Rijkaard. Pero el equipo azulgrana ha disipado las dudas con tres victorias, goles y buen juego al amparo de su público. Hoy afronta su tercera oportunidad lejos de su estadio. Le espera el Levante en el Ciutat de Valencia. "Ahora el objetivo es hacernos fuertes e intentar sumar tres puntos también fuera de casa", subraya Iniesta, uno de los jugadores azulgrana que más brilla en las últimas jornadas. La estadística es concluyente. Desde que Rijkaard se sienta en su banquillo, el Barça ha perdido casi el doble de puntos fuera, 95, que en el Camp Nou, 51.
Puyol vuelve a entrar en una convocatoria en la que no están Ronaldinho, Márquez y Zambrotta
Desde que fichara al medio centro holandés Davids en el mercado invernal de la temporada 2003-2004, y desde que perdiera ante el Madrid por 1-2 el 6 de diciembre de 2003, el Barça sólo ha tropezado dos veces en su estadio en 72 partidos. Ambas derrotas, ante el mismo rival: el Atlético de Madrid. La última de ellas data del 5 de febrero de 2006. En cambio, en sus 72 últimos partidos lejos de su campo, el Barça ha perdido en 17 ocasiones. Si la pasada temporada se le escapó el título, fue en buena medida por sus deficiencias en campo ajeno, donde contabilizó siete partidos consecutivos sin victoria y donde cosechó seis derrotas y cinco empates, es decir, se dejó 28 puntos frente a los 19 que perdió el Madrid, el campeón, lejos del Bernabéu.
Por el momento, no ha cambiado la dinámica este año. "No se jugó como queríamos y no busco excusas", admitió ayer Rijkaard en referencia a los encuentros de Santander y Pamplona. "Pero los dos partidos se disputaron después de que hubiera convocatorias internacionales". Tras dar buena cuenta del Lyon en la Champions y de vapulear al Sevilla y al Zaragoza, todo parece distinto. "Han cambiado los resultados, la actitud y el juego. El equipo está dando una buena imagen", convino Rijkaard, que tampoco se olvidó de las recientes lesiones que golpean a su equipo. Sobre todo a la defensa, donde Zambrotta estará un mes de baja por una rotura muscular, y Márquez, aquejado de molestias en el tendón de Aquiles, causa igualmente baja hoy ante el Levante. "Son importantes pero tenemos a otros jugadores", aduce el técnico holandés. Entre ellos Thuram, Oleguer y también Puyol, una vez recuperado de la lesión en la rodilla izquierda que se produjo el pasado mes de junio. "Aguantó el partidillo del jueves contra el filial sin molestias y puede entrar en cualquier momento", explicó Rijkaard. Pero no desveló dónde le colocará: "Da igual. Es como Iniesta, que con su llegada e inteligencia puede actuar por la banda o de media punta".
Independientemente de quién juegue en la zaga, Rijkaard está convencido de la reactivación del Barça. De ahí que, un tanto atrevido, lanzara su órdago: "Si seguimos así, ganaremos la mayoría de los partidos". De momento se mide al Levante, el colista, y lo hará por tercer partido consecutivo en la Liga sin Ronaldinho, que empieza a entrenarse con normalidad después de la lesión que le impidió jugar ante el Sevilla y el Zaragoza.
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