Sobre sueldos

Estamos asistiendo en estos días a un debate sobre el verdadero alcance de las recientes medidas sociales aprobadas por el Gobierno. Sin embargo, tengo la sensación de que se ha pasado por alto una medida aprobada el día 19 de septiembre por el Congreso de los Diputados: la subida de sus retribuciones. Esta subida se ha aprobado por todos los grupos parlamentarios, si bien el PP de manera un tanto cínica, se ha abstenido. La retribución de los parlamentarios será de 4.800 euros mensuales, lo que supone una subida del 3,5%, es decir, un 1,5% por encima del IPC. Hay que tener en cuenta que estas cantidades retribuyen tres días de trabajo a la semana -sin contar que el período de sesiones les otorga tres meses de vacaciones-, lo que equivale a un contrato a tiempo parcial para cualquier trabajador, que evidentemente no alcanza ni por asomo los 4.800 euros de los parlamentarios. Con todo, hemos asistido a subidas espectaculares de sueldos en las Diputaciones Provinciales durante este verano, llegando a cobrar algunos presidentes de Diputación más que el propio presidente del Gobierno. La realidad es que no existe ninguna norma que limite o fije las retribuciones de nuestros representantes políticos, más que las correspondientes partidas presupuestarias, algo claramente insuficiente. Si el sueldo de cualquier trabajador se fija en convenio colectivo, ¿no sería bueno fijar por ley los sueldos de los representantes políticos en función de criterios objetivos y actualizándolos al IPC? Creo que ésta sí sería una verdadera medida social y ayudaría a mejorar la imagen de nuestros políticos.