Reciclaje contaminante

Todo vale. Nos enseña la ecología que buena parte de los objetos se pueden reciclar después de desechados. La televisión da buenos ejemplos de esa actitud, sobre todo en verano. Se repiten capítulos de viejas series y se emiten películas archiconocidas. Un déjà vu interminable. Incluso hay programas, como Vídeos por un tubo (Antena 3), que se crean con un tipo de material que parece reutilizable hasta el fin de los tiempos. La mayoría de las grabaciones caseras parecen tener al menos un par de décadas de antigüedad. Algunas aparecen con la fecha borrada, para disimular.

Recicla también, a su manera, Hormigas blancas (Tele 5), que lleva al menos un par de sus luengos programas dedicados a Bárbara Rey y sus interminables vicisitudes. Han usado toda la documentación disponible en los diversos medios y alargan aún más cada episodio sometiéndolo a debate. Es lo suyo. Son capaces de crear suspense con asuntos mil veces tocados. Hasta sus pasos a publicidad tienen gancho: "Un momento, que después veremos uno de los episodios más humillantes en la vida de Ángel Cristo". No se lo pierdan.

Excluidas las películas -habría que seguir un argumento-, pongámonos en la situación de tener que escoger entre ambos programas. Uno zapea por aquí y ve una sucesión de vídeos borrosos de vacaciones accidentadas, golpes en la entrepierna y aventuras de mascotas y niños traviesos. Otro zapeo por allá y se cae en un panel de expertos en vivisección biográfica, en la que abundan las palizas, los insultos, los engaños y las persecuciones. Vuelves al zapeo-1 y te encuentras, por una vez, un vídeo algo gracioso. Vas al zapeo-2 y parece que van a hacer una gran revelación. Publicidad mediante, ves en el zapeo-1 dos vídeos seguidos con los que te partes. zapeo-2: la revelación sigue sin llegar. Ahora, onanismo en el Zapeo-1: ¡un resumen de los "mejores" vídeos que acaban de emitir! En el zapeo-2 hacen algo por el estilo. Definitivamente, no va a haber revelación. Rebobinan. Y así sucesivamente. Ecología.