Caja Madrid financiará la compra de la Torre Repsol con la venta de Endesa

Caja Madrid aprovechará la venta de sus acciones en Endesa para financiar la compra de una de las torres más altas de España a Repsol YPF. La operación, aprobada ayer por el consejo de la caja, supondrá un desembolso de 815 millones de euros. La caja madrileña cuantifica unas plusvalías de alrededor de 2.200 millones por el 10% que posee de la eléctrica en la oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por Enel y Acciona. La entidad desvela así sus planes en Endesa, aunque maneja la idea de mantener entre un 2% y un 5%, dependiendo de sus necesidades de financiación.

Caja Madrid celebró ayer un consejo extraordinario para aprobar la operación de compra de lo que será su nueva sede en Madrid y con la que trata de dar un impulso a su plan de expansión.

Según el diseño, en el que han participado el banco de inversión Goldman Sachs y la consultora inmobiliaria Aguirre & Newman, la caja pagará el 70% de los 815 millones de forma inmediata y el resto a la entrega del edificio, prevista para 2009.

Caja Madrid cuenta con dinero de sobra para abordar esta operación, gracias a las plusvalías por la venta de sus participaciones, sobre todo en el grupo Endesa, en donde ha decidido vender. La pelea por Endesa ha beneficiado a la caja, que sienta en el consejo de la eléctrica a su presidente (Miguel Blesa, que es vicepresidente de la eléctrica) y al político Alberto Recarte. La entidad posee el 10% de la eléctrica, lo que arroja unas plusvalías de 2.200 millones en la OPA definitiva de Enel y Acciona (a 40,16 euros por acción).

Beneficios envidiables

No obstante, la caja tiene intención de quedarse con una participación entre el 2% y el 5%, según fuentes próximas. El porcentaje definitivo depende de las necesidades de financiación que la entidad se exija. En cualquier caso, la caja cuenta también cuenta con unos beneficios envidiables (1.073 en el primer semestre de este año, con un crecimiento del 49%), que le permite pensar en aventuras como la presente y otras, como el anunciado salto a los mercados del este de Europa.

La torre, encargada por el grupo petrolero Repsol-YPF tras desechar precisamente Caja Madrid participar en el proyecto inicial, está ubicada en el eje Castellana-Norte, en la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid dentro de un complejo con tres torres más y de una altura similar (250 metros). El inmueble, diseñado por Norman Foster, contará con 74.000 metros cuadrados (más 36.000 metros bajo rasante), 44 plantas y capacidad para 4.000 profesionales, frente a los 1.600 que cuenta la actual sede.

La expansión de la caja, recogida en el Plan 2010, prevé la incorporación de 1.000 personas para reforzar la red, así como otras 1.200 personas adicionales y la apertura de otras 300 sucursales hasta 2010.

Además de éste, Caja Madrid contará con otros tres edificios singulares en Madrid: su actual sede central, ubicada dentro del emblemático complejo Puerta Europa (torres inclinadas), la sede histórica y actual sede social (en la plaza de Celenque) y el centro informático de Las Rozas, premio de Arquitectura de la Comunidad de Madrid y 2º Premio Nacional de Arquitectura. Se espera que las torres inclinadas, su actual ubicación central, se destine al alquiler.

Para Repsol, la operación supone un notable alivio para sus arcas, después de haber reducido sus beneficios más de un 3% en el primer semestre. El grupo petrolero cambió la torre por un complejo de casas bajas en la zona de Méndez Álvaro.