La inversión en obra pública por habitante de todas las administraciones es inferior a la media

Los valencianos están por debajo de la media española en licitación de obra pública, según un informe de la patronal española Seopan. El esfuerzo inversor de las administraciones central, autonómica y local fue entre 2003 y 2006 del 96,8%, tres puntos por debajo del promedio estatal.

La Administración general licitó obra pública y concesiones en territorio valenciano de casi 15 puntos por encima del conjunto. La autonómica también dedicó a este capítulo más presupuesto que la media, pero con menor intensidad que la anterior hasta rebasar en siete puntos el promedio español. Los ayuntamientos y diputaciones provinciales valencianos se quedaron, por el contrario, bastante lejos del promedio. Así, la licitación pública y de concesiones per cápita de estas dos últimas se quedó en el 66,3%, es decir a 33,7 puntos del conjunto español.

La patronal española de la obra pública reconoce en su informe que en la última década se ha producido "el principal esfuerzo inversor en la historia contemporánea" y ese hecho tiene mucho que ver la gestión de las comunidades autónomas y de los entes locales. Sin embargo, Seopan subraya como un hecho curioso que en el análisis no se ha encontrado una elevada correlación entre el esfuerzo inversor de las administraciones autonómicas españolas y el PIB por habitante de cada comunidad autónoma. "Por ello, las administraciones autonómicas aún han de racionalizar sus recursos financieros, procedentes de las transferencias que reciben y los impuestos que recaudan", dice Seopan.

La portavoz socialista de Economía en las Cortes, Cristina Moreno, empleó ayer este informe para hacer frente a las acusaciones de la Generalitat de que el Gobierno central no invierte en territorio valenciano. "No es cierto que Zapatero no invierte y que gracias al Consell se salvan los valencianos", subrayó la diputada. El PP no tardó en contestarle. José Marí Olano desmintió la afirmación de Moreno -quien sostuvo que el Gobierno central invierte el doble que la Generalitat- y tildó la interpretación de la socialista de "sesgada".