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Txeroki ordenó atentar en Santander y le dio al etarra detenido una pistola robada en Francia

Arginzoniz había hecho comprobaciones para conseguir "el éxito del ataque", según Garzón

Natalia Junquera

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ordenó ayer el ingreso en prisión incondicional de Aritz Arginzoniz, el etarra detenido el martes pasado en Santander que ultimaba un atentado con coche bomba. Garzón ordena además la captura de Txeroki, el dirigente etarra que ordenó el ataque, y de Saioa Sánchez (novia de Arginzoniz) y Eneko Zurrabeitia, Sorgin. Los cuatro se reunieron el 29 de junio en Garazi (cerca de la frontera francesa) para preparar el atentado.

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Aritz Arginzoniz, de 22 años, que se identificó como miembro de ETA cuando fue detenido el martes en la estación de autobuses de Santander, había hecho ya "las primeras comprobaciones para conseguir el éxito del ataque terrorista", sobre dos objetivos en la capital cántabra: la plaza Porticada y el Ayuntamiento, según el auto de prisión dictado ayer por Garzón. Arginzoniz había estudiado también otros objetivos como los nuevos juzgados, la sede principal del Banco Santander, el puerto y los alrededores de la terminal del ferry y la sede central de Telefónica.

Garzón dictó el auto de prisión pasadas las tres de la tarde de ayer, tras haber interrogado a Arginzoniz en su despacho del Juzgado Central de Instrucción número cinco durante unas tres horas. El juez le considera parte de un comando que, siguiendo las instrucciones del dirigente etarra Txeroki, cruzó la frontera el pasado 30 de junio en bicicleta para atentar con un coche bomba en Cantabria.

Garzón ordenó también ayer la captura de Txeroki y de otros dos presuntos terroristas del comando que el propio Txeroki identificó como Larrano: Saioa Sánchez, Hintza, y Eneko Zurrabeitia, Sorgin.

Según el relato de los hechos del auto, los tres se reunieron el pasado 29 de junio en Garazi, localidad próxima a la frontera con Francia, con Txeroki, para que les diera instrucciones. El dirigente etarra señaló Cantabria como objetivo del atentado, aunque inicialmente iba a ser en Getxo y les indicó que el 10 de julio deberían recoger el explosivo (50 kilos de amonal) en Usansolo (Vizcaya).

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En ese mismo encuentro, Txeroki entregó a Arginzoniz una de las pistolas que ETA había robado en la localidad francesa de Vauvert en octubre de 2006, así como un temporizador y un destornillador -que el etarra llevaba consigo cuando fue detenido- para montar el coche bomba.

Al día siguiente, 30 de junio, los miembros del comando cruzaron la frontera en bicicleta y se desplazaron hasta Loredo. El 9 de julio, siguiendo las instrucciones de Txeroki, Sorgin se trasladó a Usansolo para recoger el material explosivo y esconderlo en un zulo hasta tener el vehículo que utilizarían para el atentado. Sorgin llegó a llamar a Arginzoniz y comunicarle que todo estaba listo.

Arginzoniz había sido captado para la banda terrorista por Txeroki en agosto de 2006. Las fuerzas de seguridad le buscaban desde el hallazgo de explosivos el pasado 23 de diciembre en Amorebieta y Atxondo (Vizcaya). En octubre de ese mismo año había acogido en su domicilio de Elorrio (Vizcaya) a los miembros liberados de ETA Garikoitz Etxebarria, Jon, y a Hintza, quien precisamente le avisó el 23 de diciembre de que debían huir porque en Amorebieta les habían sorprendido dejándose dinero y material explosivo. Según explica el auto, Jon presentó al tercer miembro del grupo, Asier Larrinaga Rodríguez, Txester, poco antes de que el 9 de enero de 2007 ambos fueran detenidos en Francia.

Tras la captura de los otros dos miembros del grupo, Arginzoniz e Hintza fueron acogidos en Hendaya por un responsable de ETA llamado Capu, que les dio cursillos sobre manejo de armas y les tomó los datos para fabricar documentaciones falsas. Desde Hendaya, Capu trasladó a los etarras a otro domicilio en la localidad francesa de Limoges, donde coincidieron con Sorgin y Aitxzol Etzaburre, Txikitxe.

Hintza, Arginzoniz y Sorgin regresaron a la casa de Hendaya a finales de abril, acompañados por Sorgin. Dos meses después, antes de la reunión con Txeroki, Capu comunicó a Sorgin y Arginzoniz su inminente entrada en España, y les llevó a un Decatlón en Dax para comprar las bicicletas con las que cruzaron la frontera.

Sobre la firma

Natalia Junquera
Reportera de la sección de España desde 2006. Además de reportajes, realiza entrevistas y comenta las redes sociales en Anatomía de Twitter. Especialista en memoria histórica, ha escrito los libros 'Valientes' y 'Vidas Robadas', y la novela 'Recuérdame por qué te quiero'. También es coautora del libro 'Chapapote' sobre el hundimiento del Prestige.

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