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La Escolanía de Montserrat tiene un déficit anual de 480.000 euros

Montserrat tiene que reestructurar su actividad monástica y la escolanía, preservando al mismo tiempo el compromiso del monasterio con la sociedad para continuar siendo un símbolo religioso y cultural, según aseguró el abad Josep Maria Soler en una conferencia pronunciada ayer en la Torre Agbar de Barcelona. La escolanía, formada por niños, cuesta al monasterio 600.000 euros anuales y arrastra actualmente un déficit de 480.000 euros, según han asegurado portavoces del monasterio. Según estas fuentes, las aportaciones familiares por cada miembro de la escolanía es de 300 euros mensuales, lo que les da derecho a la formación intelectual y musical, así como a su asistencia y alojamiento.

La celebración de esta conferencia coincide con el décimo aniversario de la creación de la Fundación Abadía de Montserrat 2025, convertida en motor de la reforma del monasterio en relación a la celebración de sus mil años de existencia.

"El número de efectivos [monjes] ha bajado. Esto nos lleva a repensar la actividad monástica en función de las posibilidades presentes y de las demandas que recibimos", según anunció ayer el propio abad Josep Maria Soler en su conferencia. Esta reforma debe tener en cuenta, además del descenso del número de monjes, el reto de las nuevas tecnologías y la necesidad de que el monasterio continúe siendo un referente en la vida cultural y religiosa en el mundo, añadió el abad.

Envejecimiento

Según datos facilitados por el monasterio, la comunidad de Montserrat ha envejecido ostensiblemente. La abadía cuenta actualmente con 84 monjes y 10 novicios, pero la cuarta parte de estos miembros tienen más de 80 años de edad, lo que eleva a 63 la media de edad de los monjes. Entre éstos se encuentra, además, un centenario, el padre Agustí Figueras. Todos estos datos permiten asegurar que la comunidad empieza a ser insuficiente para continuar manteniendo a la larga la actividad de investigación histórica, reflexión sociológica, teología y estudios bíblicos y musicales en que ha venido especializándose a lo largo de sus casi 1.000 años de vida.

Otro reto importante del monasterio es la escolanía, dijo el abad. El conferenciante propugnó que el coro se "adapte a los cambios" de la sociedad, preservando y asegurando al mismo tiempo que esta institución siga siendo "un elemento configurador del santuario".

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Estas dos reformas fueron ya anunciadas por el abad en una conferencia histórica que el pasado mes de junio dio en la Universidad de La Sorbona de París. En aquel foro, como en el de ayer, el abad Josep Maria Soler defendió los cambios estructurales en el cenobio para así, precisó, poder "mantener y transmitir el legado de la comunidad montserratina y que éste continúe al servicio de la iglesia, de nuestro pueblo y de la sociedad en general".

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