Vuelve el chico para todo

Enrique Cerezo perdió ayer la compostura cuando le preguntaron por el coste económico de la vuelta de Luis García al Calderón. "¡Hoy es un día para estar todos contentos! ¿Por qué esa obsesión con los millones de euros? ¡Hablemos de deporte y no de economía!".

El ya ex jugador del Liverpool, de 29 años, dio una imagen muy distinta. Después de tres años en Inglaterra, habló de "vuelta a casa", de "ilusión" y "un Atlético que vuelva a mirar hacia arriba". Con la marcha de Torres, "en una operación que no tiene nada que ver", Luis García, que firmó por tres temporadas y por el que su nuevo club pagó cuatro millones de euros, coge el testigo de El Niño. Lo hará en un lugar que ya conoce bien. Después de varios bandazos, de que el Barça le cediera al Valladolid, el Toledo y el Tenerife, el respetable le recuerda por el curso 2002-03 vestido de rojiblanco. Fue cuando dio su gran salto de calidad, jugó 30 partidos de la Liga, marcó nueve goles y se reveló como uno de los mejores jugadores españoles de la campaña. Su gran año le sirvió para volver al Barça.

Rafa Benítez tomó nota y le utilizó de futbolista orquesta. Tan pronto arrancaba desde la banda como hacía de enlace con la delantera. Polivalente, con un buen manejo del balón con las dos piernas, una rotura en el ligamento cruzado de su rodilla derecha le mantuvo de baja seis meses la temporada pasada.

Ahora, en el conjunto madrileño esperan que, aparte de "experiencia y calidad", aporte la versatilidad que le convirtió en un ídolo de la grada de Anfield.

En una operación al margen de la de Torres, el medio catalán fue presentado ayer. La confirmación oficial se hizo esperar. Más que nada, porque el jugador, que llegó a Madrid el domingo por la noche, pasó a las nueve de la mañana del lunes el reconocimiento médico. Los testigos que le vieron entrar y salir del Calderón eran muy numerosos. Aun así, su fichaje se hizo oficial todavía un día más tarde.

Igual que el de Cléber Santana, que jugará las próximas tres temporadas de rojiblanco. Aunque el medio quedaba libre, ya que terminaba su contrato con el Santos, dirigido por el ex técnico madridista Vanderlei Luxemburgo, el Atlético pone sobre la mesa seis millones de euros, ya que el agente posee los derechos del futbolista. Apuesta personal de Jesús García Pitarch, el volante, de 26 años, jugó en 2005 en el Kashiwa Reysol, japonés.