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Entrevista:ROQUE SANTA CRUZ | Delantero de Paraguay en la Copa América | Fútbol

"Me divierte jugar en punta porque ahí no pienso"

Diego Torres

Ocho años en Baviera no han servido para curar la nostalgia de Roque Santa Cruz (Asunción, Paraguay; 1981). El máximo goleador de la Copa América es un tallo de 1,90 metros que se pasa los días de concentración en compañía de los paisanos; tomando tereré, una infusión de hierba mate que se bebe fría; tocando la guitarra y escuchando canciones del folclore guaraní: "Bravea en sus sienes su orgullo de plumas / Su lengua salvaje panal de Eirusu / Collar de colmillos de tigres y pumas / Enjoya a la musa de Ybyturusu".

Pregunta. ¿Qué música es ésta?

Respuesta. Una guaraina. Mezcla estrofas en guaraní y en español. Son lamentaciones de añoranza por el país escritas por músicos que recogieron el testimonio de los exiliados y las víctimas bélicas. La Guerra del Paraguay nos enfrentó a Argentina, Brasil y Uruguay en 1865 y marcó mucho a nuestros abuelos. La población se redujo a menos de la mitad. Sólo 300.000 personas, la mayoría mujeres, ancianos y niños, con una esperanza de vida muy corta. Esa experiencia formó nuestra mentalidad, de pujanza, de garra.

"Mi historia con el Bayern está terminada. No me han dado confianza. Ya no tengo la cabeza para volver a Alemania"
"Paraguay está intentando cambiar su filosofía. Durante décadas, la selección fue muy defensiva. Hoy salimos a proponer"
"Admiraba a Elber. No era muy rápido, pero tenía una ubicación del espacio impecable. Siempre contaba con muchas ocasiones para definir"

P. ¿Cómo se traduce eso en un campo de fútbol?

R. Durante décadas, la selección se caracterizó por un fútbol defensivo. Hoy, con Martino [técnico argentino de la escuela de Marcelo Bielsa, ex seleccionador albiceleste], se está intentando cambiar la filosofía. No sólo jugamos a esperar. Salimos a proponer. Queremos ser partícipes y hacernos con el partido. El cambio es bien grande. Es difícil porque el juego defensivo es una característica nuestra. Va con nuestro carácter.

P. A usted le fichó el Bayern porque le vio alto, fuerte y rápido. Pero usted no sirve sólo para chocar. ¿No cree que los alemanes nunca le entendieron?

R. Me encuentro más cómodo cuando me dan el balón al pie que a la cabeza. Y procuro no chocar ni recibir de espaldas. Siempre trato de utilizar los espacios. Me suelo mover contra la jugada porque así aprovecho que la mayoría de los defensas miran la pelota y no me siguen. Soy rápido y suelo sorprenderlos.

P. ¿Dónde aprendió a moverse en punta?

R. Es de sangre. En el Bayern no jugué de delantero. Siempre me ponían de volante por la derecha. Sería falso decir que aprendí a ser un goleador en él porque nunca jugué mucho en mi puesto. A mí lo que me divierte es ser punta. Ahí juego sin pensar.

P. Sus tres goles a Colombia le dan ventaja para ser el máximo artillero de la Copa América. ¿Con quién compite?

R. Con mi compañero Cabañas, con el chileno Suazo y con Hernán Crespo.

P. ¿Ha admirado a algún delantero especialmente?

R. A Giovanni Elber. Jugué con él. No era muy rápido, pero tenía una ubicación impecable, un gran sentido del espacio en la cancha. Siempre contaba con muchas ocasiones de definir libre de marcaje.

P. Este invierno le vi entrenarse un día y falló unas diez ocasiones de gol ante el portero. ¿Qué le pasaba en el Bayern?

R. Durante cinco años estuve muy golpeado. Ahora estoy encontrando otra vez el punto. Me vuelvo a sentir punzante, vertical, acertado en el arco. Cualquier delantero se sentiría bien en un equipo como el Bayern, que crea muchas ocasiones. Pero a mí nunca me dieron la posibilidad de ser el delantero principal. Cualquiera necesita confianza para poder jugar y hoy en día no tengo ninguna. Mi historia con el Bayern está terminada. Eso no va para adelante.

P. El Bayern ha fichado a Klose y Toni. No parecen creer en usted.

R. Hace tres meses me reuní con Paraguay para jugar un amistoso contra México. Ahí, entre mis amigos de la selección, me di cuenta definitivamente de que quería dejar el Bayern. Pensé que estaba en el lugar equivocado. Ya no tengo la cabeza para volver. Renové mi último contrato porque estaba lesionado del cruzado. Es momento de dar un paso al costado. Me catalogaron como un jugador que se lesiona mucho y ahora no se pueden dar el lujo de retenerme.

P. ¿Dónde piensa ir?

R. No me quiero quedar en el fútbol alemán. Es una mentalidad distinta. No es tan liberal como otros campeonatos. Además, no podría enfrentarme al Bayern. Por respeto a sus aficionados y a la ciudad. Mis dos hijos nacieron en Múnich.

P. Con Paraguay, usted parece otro jugador. ¿Hay más complicidad?

R. Claro que sí. Nuestra lengua para el fútbol es el guaraní. Eso crea lazos. Es algo tan nuestro que cuando estamos juntos disfrutamos de un modo especial. Tenemos tanta predisposición a ser aguerridos como a establecer relaciones de amistad. Eso nos fortalece como equipo.

P. ¿Cuál es la expresión que más emplea en la cancha?

R. ¡Ne-añó! Así pido la pelota. Significa: estoy solo.

Roque Santa Cruz, en el momento de marcar un gol a Calero, portero de Colombia..
Roque Santa Cruz, en el momento de marcar un gol a Calero, portero de Colombia..ASSOCIATED PRESS

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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