El alcalde dimisionario de Meira reconoce que se equivocó

El alcalde dimisionario del municipio lucense de Meira, Miguel Antonio García Vázquez, reconoció que se equivocó al haber aceptado el apoyo que le brindó el PP para hacerse con el mando de este municipio, que lo llevó a vulnerar un acuerdo de su partido para aupar a la alcaldía al cabeza de lista de Terra Galega (TeGa), Antonio de Dios. "Reconozco que me equivoqué", inició García, en la sede del PSOE en Lugo y acompañado por el resto de candidatos, la lectura de un comunicado de diez puntos, en el que también aseguró: "No tenía ni tengo ni tendré pacto alguno con el PP".

"Voté por mí luego de haber conseguido los cuatro votos del PP, pensando que sería capaz de aunar a los grupos políticos de Meira, sin darme cuenta de que esos votos venían a mí por cuestiones de tipo personal y no político, ya que yo no los pedí", se justificó. García también reconoció que tenía la recomendación del PSOE de apoyar al candidato de TeGa y se defendió de las acusaciones que recibió a lo largo de estos días admitiendo que cometió un error, pero, matizó, "no un delito".

En su discurso autoinculpatorio insistió en que lo acontecido en Meira tiene un solo responsable: "Yo". García estuvo acompañado por el secretario provincial del PSOE, Luis Ángel Lago, quien alabó su rectificación al haber renunciado a su cargo, cuestión, que, precisó, "muy pocos lo hacen" y aclaró que quedan en suspenso el expediente de expulsión del partido y la disolución de la agrupación local socialista.

A partir de ahora se abrirá un periodo de negociaciones con TeGa para ver cómo queda el gobierno de Meira, donde, de momento, García se quedará como concejal, al menos, hasta la sesión de investidura. García considera que el comportamiento del PP votándolo a él fue una estrategia. "Yo nunca los pedí [los votos], con lo que entiendo que no fueron de buena fe", afirmó.