Caride denuncia "razones políticas" en los cambios en la vía de O Salnés

La conselleira de Política Territorial, María José Caride, denunció ayer la existencia de "motivos políticos" en las modificaciones introducidas sobre la marcha entre 1991 y 1993 en la construcción en el corredor de O Salnés, que fueron los que finalmente provocaron su hundimiento en noviembre pasado. Las razones políticas las marcó "la agenda electoral", con las autonómicas previstas para el mismo año en que se inauguró la carretera. Según Caride, la consellería, entonces dirigida por José Cuiña, decidió "acelerar", pero al hacerlo "se dejó por el camino la seguridad de los usuarios".

Caride cerró ayer las comparecencias ante la comisión parlamentaria que investiga las razones del hundimiento del vial a los 13 años de su inauguración, un suceso que la conselleira consideró "la crónica de una catástrofe anunciada". "La agenda electoral pesó más que la seguridad", lamentó la titular de Política Territorial, que consideró el corto plazo en que se ejecutaron las obras "un efímero éxito del Gobierno de Manuel Fraga, pero un gran fracaso para los ciudadanos".

La celeridad, recordó Caride, comenzó ya con una tramitación administrativa que "batió récords". "Cuando se hacen las cosas con tanta prisa, algo queda en el camino, y en O Salnés ese algo es la calidad", reprochó la conselleira a sus antecesores.

De la documentación sobre la vía de O Salnés que obra en la consellería se concluye, continuó María José Caride, que "la única justificación" del modificado en el proyecto fue "la de acortar los plazos". Dicho modificado consistió en la sustitución de los grandes tubos de hormigón armado previstos para el drenaje por otros de acero galvanizado, más fáciles de instalar pero menos fiables, y cuya rápida corrosión motivó el hundimiento del vial.

Caride expresó su extrañeza por el hecho de que se aprobara un modificado que reducía la calidad de las obras, cuando lo habitual es que sólo se autoricen para mejorarla.

Cuiña y los técnicos

Aunque sin citar a Cuiña, que atribuyó a los técnicos de la consellería los cambios en el proyecto constructivo, la conselleira consideró "difícil de imaginar" que el personal del departamento de Política Territorial tomara la decisión de sustituir los tubos, ya que "no supuso una mejora técnica". Los tubos finalmente empleados "nunca se utilizaron en Galicia de forma generalizada, sino sólo en situaciones excepcionales".

La conselleira también consideró "suficientemente acreditado" que el deterioro del vial "no se produjo en dos días, por lo que no fue consecuencia de las riadas" de octubre y noviembre del año pasado. Caride incidió en la deficiente conservación de la vía, para prometer que su departamento hará del mantenimiento de las infraestructuras "una línea estratégica" para que no se repitan casos como el de O Salnés. En ese contexto explicó la reorganización de la Dirección Xeral de Obras Públicas de la consellería, aprobada ayer por el Consello de la Xunta, con la creación de las subdirecciones de Conservación y Explotación y de Planificación y Proyectos.

El portavoz del PP en la comisión de investigación, Alejandro Gómez, acusó a los actuales cargos de Política Territorial de ejercer una "burda manipulación de los hechos" y una "campaña de difamación", para "desprestigiar con medias verdades" a la Xunta de Manuel Fraga. Como en anteriores sesiones, Gómez centró sus preguntas en los motivos por los que se cerró el vial totalmente para su reparación.

Ante la comisión compareció también el decano del Colegio Técnico de Obras Públicas de Galicia, José Antonio Mondelo, quien opinó que el cambio de los tubos fue "una de las peores decisiones técnicas", y agregó que por lo general ese cambio obedece a una reducción de presupuesto.