Casa Asia pone piso en Madrid

Cinco años y medio después de su creación, Casa Asia, con sede oficial en Barcelona, expande sus redes por España con la inauguración, el próximo miércoles, de su primera delegación en Madrid. El País Vasco, Galicia y Valencia son los próximos objetivos en el plan de proyección de la región Asia-Pacífico al resto del territorio español que se ha marcado esta institución estatal, creada en noviembre de 2001 por el Ministerio de Asuntos Exteriores con la participación de la Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de Barcelona, que ejerce de catalizador de las relaciones y actividades culturales, sociales, científicas y económicas hispano-asiáticas. La exposición de fotografía china contemporánea La invención del presente será la carta de presentación en sociedad de la delegación, que tendrá su sede en el palacio barroco del marqués de Miraflores, en la céntrica Carrera de San Jerónimo.

Con la inauguración de la delegación en Madrid, Casa Asia culmina una primera etapa de puesta en marcha de la institución estatal que ejerce de plataforma de las relaciones de España con Oriente, proyectarla a la sociedad e iniciar su expansión al resto de España tras su consolidación en Barcelona. Una etapa capitaneada por el que hasta ahora ha sido su director general, Ion de la Riva, nombrado el pasado 1 de junio embajador de España en India, y que el próximo miércoles acudirá al acto de apertura de la sede, que servirá de presentación en sociedad de su sucesor en el cargo, el también diplomático Jesús Sanz (Madrid, 1963), quien ejercerá de anfitrión. A la inauguración han confirmado la asistencia el secretario de Estado del Ministerio de Asuntos Exteriores, Bernardino León; el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; el presidente de la Sociedad Estatal para Exposiciones Internacionales, Javier Conde, y el decano del cuerpo diplomático de los embajadores asiáticos, el filipino Joseph B. Bernardo Medina.

El creciente interés del sector económico por el continente asiático, la voluntad del Ayuntamiento de Madrid, que en febrero pasado se integró en el consorcio público de administraciones -Ministerio de Asuntos Exteriores, Generalitat y Ayuntamiento de Barcelona- que rige Casa Asia, así como el hecho de que la sede de las embajadas de los países orientales, cuya estrecha relación es fundamental para la institución, esté en Madrid han sido determinantes en la apertura de esta delegación en la capital de España. "La sociedad siempre va por delante de las administraciones y debíamos movernos ante la demanda existente entre el sector empresarial y social madrileño de tener contactos más sólidos y conocer mejor la región Asia-Pacífico, de la que Casa Asia ha sido un motor desde Barcelona", explica Ion de la Riva. "La delegación en Madrid facilitará, además, la permanente relación de la institución con las embajadas de los países orientales, con sede en la capital".

Gallardón expresó el pasado febrero, en el acto de firma de la adhesión del Ayuntamiento de Madrid al consorcio de Casa Asia, el interés del municipio por encontrar "un punto de encuentro propio con Asia" tras la tradicional mirada de la capital española a Europa y Latinoamérica. El Consistorio se ha comprometido a aportar 180.000 euros a la entidad durante tres años para financiar actividades, así como al pago del alquiler de las tres plantas del edificio del palacio de Miraflores, de 1.250 metros cuadrados, que ocupará la sede y las obras de habilitación, que todavía no han finalizado en dos de las tres plantas del edificio.

Casa Asia disponía desde hace un año y medio de una oficina provisional en el Centro Conde Duque de Madrid dirigida por Fernando Delage, que ahora asume la dirección de la delegación madrileña.