PP y PA pactan en San Fernando

La lista más votada no gobernará en San Fernando. El PA y el PP rubricaron ayer un acuerdo que impedirá que el candidato socialista, Fernando López Gil, sea el alcalde de este municipio gaditano durante los próximos cuatro años. Los andalucistas mantendrán la alcaldía y los populares liderarán la Gerencia de Urbanismo. Ambos partidos justificaron este pacto en la "estabilidad" de una "mayoría más cómoda".

Los resultados electorales habían sido en esta localidad muy ajustados, aunque los socialistas lograron ser los más votados y conseguir nueve concejales, uno más que el PA y el PP, que empataron con ocho. Durante los últimos días el PSOE había intentado llegar a un entendimiento con los socialistas, que fue rechazado por los andalucistas por no existir la posibilidad de mantener la alcaldía y por el trato recibido por el PA en la Diputación durante el pasado mandato, cuando el PSOE rompió todos los acuerdos con los andalucistas a cuenta del Estatuto.

Manuel María de Bernardo, del PA, conseguirá su aspiración de ser alcalde más allá de 2010, año clave para San Fernando, con varias conmemoraciones de renombre. "Es el pacto más moral que se ha dado en ciudades de más de 50.000 habitantes. Refleja la voluntad de los ciudadanos que, prácticamente, habían repartido sus votos al 33% entre todos. Había tres programas y ninguno ganó", explicó el futuro primer edil. La próxima primera teniente de alcalde, Carmen Pedemonte, del PP, aseguró que la rúbrica del pacto es "un acto de responsabilidad. Hemos pasado cuatro años en una ciudad anclada, donde no se avanzaba, había necesidad de hacer un acuerdo con luz y taquígrafos. Es un reto y hoy estamos dando el primer paso". El pacto no será sencillo porque ambas formaciones mantienen diferentes posturas sobre aspectos claves como el paso del tranvía por el municipio o el plan de reforma del centro. Serán los populares los encargados de "buscar el consenso necesario con los vecinos" para el desarrollo urbanístico.

El candidato socialista, Fernando López Gil, principal perjudicado del pacto, criticó a los dos partidos: "Es el peor acuerdo posible. Son dos personas que no se entienden capaces de dejar sus valores por aguantar un sillón".