LA PLAYA DEL MANZANARES
En esta foto de Pablo Rizo Escosa y tomada por su abuelo, Joaquín Escosa García, en 1920, el Manzanares parece una playa. La amplia colección del fotógrafo muestra carnavales por el paseo del Prado antes de la guerra, el autogiro de De la Cierva en un aeropuerto de Barajas casi vacío u hombres cruzando a caballo el puente de Toledo. "Es un Manzanares increíble", dice Chema Conesa, "no hay nada reconocible, los árboles no parecen siquiera mesetarios, la foto nos lleva a África, a los niños de Marruecos bañándose desnudos tan ricamente". Es una fotografía estereoscópica, una técnica por la cual se hacían dos fotos al mismo tiempo que luego, al ser vistas con un visor binocular, daban una sensación de relieve. Este tipo de experimentos buscaba el realismo y el movimiento del cine recién inventado.