Alarma en Valdebernardo

Valdebernardo. ¿Intentos reales de secuestro o psicosis colectiva? No se sabe. Pero no hay un solo vecino que sea ajeno a lo que circula de boca en boca por el barrio desde hace dos semanas. El 24 de mayo, un hombre trató de llevarse supuestamente a dos niños, de 4 y 5 años, cuando paseaban con su madre por la avenida de Los Almendros. Unos chicos lo evitaron. A la mañana siguiente, en la misma calle, otra niña pequeña estuvo, presuntamente, a punto de ser secuestrada. Por último, en el colegio público Los Almendros, a una manzana de donde sucedieron los dos supuestos intentos de secuestro, un hombre de 26 años que fotografiaba con su móvil a una niña fue detenido por la policía el pasado miércoles. Estas historias circulan por Valdebernardo y el miedo, libre, ha aparecido.

Un hombre de 26 años fue detenido el miércoles por fotografiar a una niña en un colegio

"Nos ha apoyado todo el mundo. Están al pie del cañón. Porque no es un robo en un domicilio. Es un intento de extracción de nuestros hijos", denunció ayer David Escudero. Él se llevó un buen susto cuando su mujer le contó que un hombre "alto, corpulento, con el pelo engominado y con barba" trató de llevarse a dos de sus hijos en plena calle. Sucedió, según asegura, sobre las diez de la noche, muy cerca de su casa, un bloque donde vive una importante colonia de etnia gitana. Según David, la familia puso una denuncia en la comisaría de San Blas. La policía lo negó ayer.

A la mañana siguiente, hubo otro intento de secuestro. José Antonio Cerrato, dueño de una panadería, no podía sospechar que tras despachar una barra a una niña pequeña, ésta iba a quedar en peligro nada más salir a la calle. "No me enteré de nada pero se ve que cuando la cría ya estaba fuera un hombre trató de llevársela. Una vecina lo impidió", contaba ayer. "Vino la madre, histérica y llorando, para preguntar si había visto algo y si tenía cámaras de seguridad", explicó. No las tiene.

Cierto o incierto, exagerado o no, lo cierto es que hay inquietud entre los padres. Bastantes de ellos creen, sin embargo, que no hay para tanto y que todo podría ser "falso" o "mucho menos importante de lo que cuentan".

De momento, el único hecho comprobado es la detención, el pasado miércoles, de un hombre de 26 años junto al colegio Los Almendros. Según la policía, el detenido fotografiaba con su móvil a los menores. Hoy declarará por un delito contra la libertad sexual y otro contra los menores. En el centro escolar, un grupo de cuidadoras veía exagerado el miedo en el barrio. "Yo sé que aquí no ha pasado nada", decía una de ellas. "Es un bulo", se atrevía a decir otra. Varios padres confirmaron que el centro les ha enviado "una circular" para relajar la alerta que se vive en el barrio.

"Mira, está todo bien. De un problema así de pequeño se ha liado una...", decía una madre que, por si acaso, eso sí, prefería no decir su nombre. "Yo no estoy preocupada", aseguraba Ana, otra madre, que salía del colegio junto a su hijo Iván, de seis años. El nene decía: "Hay un hombre que hace fotos. Le han visto con una camiseta de rayas". Seguramente, la imaginación infantil ha creado mil versiones de la misma persona, si es que ésta existe. Nuria, de siete años, describía: "Lleva camisa blanca, es calvo y no lleva barba. A mi amiga le hizo quince fotos y a mí una". Su madre le decía: "¡No inventes, eh!"

Mari Carmen, una madre que paseaba ayer junto a sus dos hijas, de 4 y 6 años, ofrecía su propia teoría: "Hay psicosis, pero no sólo por lo que haya podido pasar en el barrio, sino por todo lo que se ve en la televisión". Y es que el recuerdo del caso de una niña británica llamada Madeleine McCaan, secuestrada el pasado 3 de mayo en Praia da Luz, en el Algarve portugués, ha podido despertar más preocupación de la normal entre los ciudadanos de Valdebernardo. Así lo cree también la policía.