El Supremo concluye hoy el debate que puede llevar a Otegi a la cárcel
El fiscal dice que en el homenaje a Argala llamó a la lucha armada
La Sala Penal del Tribunal Supremo continuará deliberando hoy sobre si confirma o revoca la sentencia de la Audiencia Nacional que condenó al portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, a 15 meses de prisión por un delito de enaltecimiento del terrorismo en un homenaje al dirigente etarra José Miguel Beñarán Ordeñana, Argala. El fallo del alto tribunal se conocerá previsiblemente hoy.
La Sala Penal del Supremo inició ayer la deliberación del recurso de Arnaldo Otegi nada más terminar los informes de la defensa y del fiscal, pero contra lo esperado, no anticipó el fallo de la resolución porque además del caso de Otegi tenía varios asuntos más sobre los que pronunciarse y terminará hoy la deliberación. La sentencia será redactada por el magistrado ponente Siro García. Los magistrados se comprometieron con el presidente, Juan Saavedra, a mantener la reserva hasta que se haga pública la decisión.
Si la sentencia es condenatoria, se notificará a la Audiencia Nacional para que el fallo lo ejecute la Sección Tercera de lo Penal. Ésta puede inclinarse tanto por dejar en suspenso la sentencia, como por considerar que la peligrosidad criminal de Otegi, habida cuenta de que sería su segunda condena y de que tiene otras causas abiertas, pueden llevarle a intentar eludir la acción de la Justicia, lo que justificaría su ingreso en prisión ante el riesgo de fuga.
La vista del recurso se celebró ayer, después de un primer aplazamiento para que no coincidiera con la campaña electoral. La abogada de Otegi, Jone Goirizelaia, argumentó durante casi una hora que los fundamentos de la sentencia de la Audiencia Nacional se habían basado en testimonios policiales e informaciones de prensa, admitidos por el tribunal con vulneración de derechos fundamentales.
Goirizelaia sostuvo que en el homenaje al etarra Argala, Otegi "era un representante político y actuó de esa forma, dentro de su libertad de expresión" y sus manifestaciones se mantuvieron en el ámbito de un "análisis político". Según su abogada, Otegi se limitó a respaldar la propuesta de Bergara, relativa a un frente común de partidos nacionalistas, y a sostener que Argala había sido un hombre con "una acertada visión de futuro".
En opinión del fiscal del Tribunal Supremo José María Álvarez, Otegi no se limitó a hacer declaraciones políticas sino que dirigió alabanzas a Argala, e hizo llamamiento a la lucha armada tal como demostraron unas pruebas "perfectamente practicadas". El fiscal aseguró que no cabe alegar vulneración de la libertad de expresión cuando se están promoviendo actividades terroristas, porque no se puede alegar la vulneración de un derecho fundamental vulnerando otros como el derecho a la vida, a la integridad física, etcétera. También insistió en que "aquí no se está juzgando a Otegi por ser Otegi, sino por lo que hizo", que fue homenajear "no a un dirigente político, sino a un dirigente terrorista".
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