Valderas intenta evitar que su candidato en Chiclana pacte con el PP

El coordinador regional de IU, Diego Valderas, acudió anoche a Chiclana. Fuentes del partido explicaron que será el primer encuentro de otros muchos con su candidato en este municipio, José Pedro Butrón, después de una "campaña muy dura". Valderas había dicho por la mañana que no aceptará pactos del PP mientras que Butrón insistía, en declaraciones a los medios, que no renuncia a nada para que el PSOE no siga al frente de la alcaldía. Unas declaraciones con las que presiona públicamente a su propia formación y que provocaban que el propio Valderas viajara ayer hasta Chiclana.

La noche del 27 de mayo, cuando ya sabía que los socialistas habían perdido la mayoría absoluta y que sus tres ediles serían claves para el futuro político del Ayuntamiento, Butrón no dudó en dejar su propia celebración para reunirse con el candidato del PP, Ernesto Marín, en el hotel donde los populares festejaban su importante incremento en número de votantes. Butrón buscó la foto. Y se agarra a ella para desafiar las directrices de su partido e insistir en que prefiere pactar con la derecha que con quien, según él, no tiene las manos limpias en Chiclana.

Butrón, de 34 años, lideró las juventudes socialistas de Chiclana. Pero ahora no quiere ver al PSOE. Hace cuatro años se presentó como candidato de IU y arrancó un solo edil. Entonces tenía ante sí la mayoría absoluta del PSOE. Primero con Manuel Jiménez Barrios y, durante los últimos tres años, con José María Román.

Butrón ha realizado una oposición muy dura y no ha dudado en relacionar al PSOE chiclanero con la corrupción urbanística, aunque muchas de esas veces sin pruebas ni denuncias de por medio. Llevó a la Fiscalía al edil Sebastián Verdugo por haber utilizado supuestamente medios públicos para obras en su vivienda. Arremetió contra el edil de Urbanismo, Joaquín Muriano, por su relación con un hotel del que fue arquitecto previamente. Y criticó los intereses privados en el sector inmobiliario de la edil de fiestas María Jesús Casteñeda. "Chiclana es como Marbella", ha llegado a decir.

Esos enfrentamientos le han llevado al candidato de IU a asegurar que no pactará nunca con el PSOE, al menos, para revalidar al actual primer edil. "Román no será nunca alcalde con mis votos". Con el PP, aunque diga que no ha hablado, sí se ha hecho fotos. El PSOE ya denunció contactos entre IU y PP antes de los comicios, cuando Butrón prefirió guardar silencio a una denuncia de UGT que acusó al candidato del PP, empresario de profesión, de tener trabajadoras sin contrato. Los populares están pendientes de un tripartito para situar a Marín en el sillón de alcaldía. Para ello necesita sumar a sus ocho concejales, los tres de IU y, al menos, los dos ediles del PA o la concejal del PSA. El PSOE se quedó con 11 concejales, a dos de la mayoría absoluta.