Empuje eléctrico

La Bolsa española había subido hasta tocar techo la semana pasada. Faltaba el empuje de los grandes valores para superar definitivamente los 15.200 puntos. El tirón de las empresas eléctricas, sobre todo de Iberdrola, ha acabado por animar a los grandes y llevar el Ibex a los 15.501,5 enteros.

El mayo que ha quedado atrás ha sido el mejor en la historia del Ibex. El Índice Selectivo ha subido un 6,64% y acabó marcando un máximo histórico el último día del mes. Pero los mercados no han aflojado el ritmo y el viernes, primer día de junio, continuaron su carrera alcista y superaron los 15.500 puntos, llegando a marcar un máximo intradía de 15.542,5 enteros.

Las operaciones corporativas han vuelto a marcar la agenda. Viejos culebrones de los que se han escrito nuevos capítulos: como la próxima oferta que Imperial Tobacco tiene previsto lanzar sobre Altadis a un precio de unos 50,50 euros por acción; o la propuesta detallada del consorcio que integran Royal Bank of Scotland, Santander y Fortis por ABN Amro.

También, nuevos seriales. Aunque más bien parecen una secuela. El miércoles, el multimillonario belga Albert Frère comunicó la compra de un 5% de Iberdrola. Un empujón más para un valor que ya venía lanzado.

La eléctrica vasca ha cerrado la semana con un crecimiento del 8,73%. Además, ha tirado del resto de empresas energéticas, envueltas en rumores y noticias de movimientos accionariales: Unión Fenosa (6,05%), Repsol (3,31%)o Red Eléctrica (2,85%). Los efectos se han dejado sentir incluso entre las constructoras con grandes intereses en la electricidad: ACS (4,12%) y Acciona (4,97%).

Pero para alcanzar los máximos, era necesario que los grandes valores del Ibex se sumaran con decisión a los números verdes. La energía eléctrica ha llegado sobre todo al Santander, cuyos títulos han subido un 6,07%.

En Europa, Francfort sigui sacando músculo. En lo que va de año ha subido un 21,08% y a tenor de los sucedido esta semana no ha aflojado su ritmo, sino más bien todo lo contrario.

Las noticias sobre la marcha de la primera economía del mundo no animan precisamente los mercados en Nueva York. Más bien, lo contrario. Así que las Bolsas estadounidenses se mueven a golpe de operación corporativa. La compra de Energy Brand por Coca Cola o la de AG Edwards por Wachovia, son ejemplos de movimientos que han cristalizado.

El petróleo, por su parte, ha retrocedido posiciones. Tras cotizar la semana pasada por encima de los setenta dólares, el barril del crudo del Mar del Norte en esta ocasión ha perdido esta cota y ha apoyado el crecimiento de las Bolsas. La expectativa de que el precio del petróleo suba pronto ante la proximidad de la temporada de huracanes en el Caribe hace especialmeente buena esta evolución.