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Reportaje:Elecciones 27M

Puedo prometer y prometo

Los 'alcaldables' han prometido desde empastes dentales hasta una jornada laboral que termine a la hora de los toros

El filósofo Francesc Pujols profetizó que un día los catalanes, por el mero hecho de serlo, lo tendrían todo pagado. Para los barceloneses, ese día llegará el lunes. Gane quien gane, a poco que los candidatos cumplan una pequeña parte de sus promesas. Todos hacen suya la frase del ex presidente del Gobierno Adolfo Suárez: "Puedo prometer y prometo", aunque Jordi Portabella (ERC) y Alberto Fernández (PP) han sido los más rumbosos.

- Alberto Fernández. El candidato popular se ha comprometido a que los menores de 35 años que compren un piso reciban hasta 12.000 euros para gastos (los pagará la Generalitat). Piensa pagar 30 euros a las familias que quieran bloquear ciertas páginas de Internet (pese a que hacerlo no cuesta un céntimo). Si los padres usan el dinero para comprar dulces a los niños, que no se preocupen, Fernández garantiza empastes gratis. Los mayores de 65 años pagarán sólo un euro cuando vayan al cine. Algunas noches del año abrirán los museos (es sabido que los noctámbulos van de copas porque no pueden irse al Macba). Y además, irán en metro, que abrirá las 24 horas de los siete días de la semana. Si tanta nocturnidad acaba con la salud del personal, los barceloneses podrán ir al médico de una mutua privada y tendrán rebajas en las cuotas a la Seguridad Social. Finalmente, los padres recibirán los elementos necesarios para hacer análisis de sangre y orina a los hijos, de modo que puedan saber si se drogan. Y, ya para remate, el castillo de Montjuïc volverá a ser museo militar.

- Jordi Portabella. El cabeza de lista de ERC no se ha quedado a la zaga. Lo primero que hará será trasladar el Parque de Atracciones del Tibidabo a la zona del Fórum. Además, creará jardineros de barrio (no dijo si en ratos libres regarán las macetas del vecindario). Las niñeras no serán de barrio, sino que habrá una por bloque. En cada calle, un autobús. Eso sí, a las 17.15 estará lleno, porque todo el mundo terminará la jornada a la hora de los toros, las cinco de la tarde (a excepción de los empleados del transporte público). Las jornadas serán de seis horas diarias, lo que no significa, dijo, que tengan que ser de 30 horas semanales (?). Los enfermos se curarán en casa, gracias a un familiar que tendrá la formación precisa a través de las "unidades de especialización domiciliaria" que habrá en los hospitales. El candidato republicano prometió 1.000 ascensores (ni uno más ni medio menos). Y conseguirá que el Ministerio de Hacienda regale a Barcelona el edificio del Banco de España. ¿Con placas solares en el techo? Probablemente, porque las habrá en uno de cada tres edificios. Y 10.000 pisos en el mercado, gracias a que convencerá a sus propietarios de que los pongan en alquiler. Los convencerá uno por uno y en charlas privadas. Un suponer.

- Imma Mayol. La única mujer que opta a la alcaldía promete menos. Pero en materia de vivienda no se queda atrás: 12.000 pisos en el mercado. Muchos de ellos de alquiler y con precio fijo: 350 euros al mes. Como ahora algunas familias necesitadas tienen subsidios inferiores (315 euros mensuales), se elevará esta percepción a 500 euros. Mayol no reclama el Banco de España, pero sí el edificio de la cárcel Modelo para convertirlo en museo del Memorial Democrático. Además, se instalarán enchufes en la ciudad para que recarguen los coches eléctricos y Barcelona se convertirá en centro de acogida de los perseguidos de todo el mundo por causa de su comportamiento sexual. Los inmigrantes tendrán espacio de acogida en las casas de los jubilados y los comercios de los barrios renunciarán a abrir en función de la ley de la oferta y la demanda para hacerlo por turnos, de modo que todo el mundo pueda comprar a una hora u otra (siempre y cuando no tengan que cerrar a las 17.00 para cumplir la promesa de Portabella). Al fin, no todo va a ser mensaje práctico, Mayol asume la estética: cada barrio tendrá su propio color, el mismo de las flores de los árboles que allí se planten.

- Xavier Trias. El candidato de CiU bajará los impuestos municipales. El IBI (impuesto de bienes inmuebles) a la mitad y la tasa de recogida de residuos, la reducirá una cuarta parte. Aparcar en el área verde será gratis para los residentes y las placas solares que Portabella ponía en uno de cada tres edificios, Trias las extiende a todos y gratis, o lo que es lo mismo, subvencionadas al ciento por ciento. Construirá 10.000 viviendas para jóvenes en la zona del Morrot y muchas más entre Montjuïc y el Llobregat. Y para ir del Llobregat al Besòs, un tranvía que cruce Barcelona por la Diagonal, proyecto que ha hecho suyo Imma Mayol.

- Jordi Hereu. Queda Jordi Hereu. Realmente, el más cauto en materia de compromisos. El metro, ha prometido el candidato socialista, abrirá también los viernes toda la noche, y media hora más en los días laborables. Se recuperarán 45 interiores de manzana. La ciudad entera tendrá conexión por wifi y en cada barrio habrá instructores para fomentar la convivencia. Se habilitarán 10 fábricas para la creación artística. Y la calle de Urgell será un bulevar.

Ninguno de los candidatos barceloneses ha alcanzado lo que se cuenta de un alcalde zamorano que en 1931 prometió a su pueblo un puente: "Pero si no tenemos río", le dijo un ciudadano. "Pues haremos también un río", respondió el candidato.

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