Los sindicatos europeos abogan por el pleno empleo de calidad, estable e integrador
La CES aprueba el 'Manifiesto de Sevilla' en defensa de las conquistas sociales en la UE
La Confederación Europea de Sindicatos (CES), que agrupa a 36 organizaciones de trabajadores, aprobó ayer por unanimidad el Manifiesto de Sevilla, un documento que aboga por el pleno empleo de calidad, la integración de mujeres e inmigrantes y la estabilidad industrial. Los sindicatos se comprometieron con la construcción de una Unión Europea más social y ecológica.
El 11º congreso de la CES se clausuró ayer en Sevilla tras cuatro días de trabajo bajo el lema A la ofensiva: por una Europa social, solidaria y sostenible. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, cedió la presidencia a la sueca Wanja Lundby Wedin. En su discurso de despedida, Méndez puso especial énfasis en la necesidad de reactivar el proceso de construcción europea de "abajo arriba", desde los trabajadores al poder político. "Tenemos que provocar el impulso desde abajo y devolver la ilusión a los trabajadores europeos con el proyecto de Europa ofreciéndoles nuestros cauces, organizaciones y resoluciones para que se consideren actores protagonistas de Europa", dijo Méndez, quien lamentó "la pérdida de confianza" en la capacidad de la Unión Europea para mejorar el progreso social.
Su sucesora alertó sobre los peligros que "acechan" a las conquistas sociales y laborales consagradas en Europa. "Muchos piensan que tenemos la mejor sociedad del bienestar y el mejor sistema social del mundo, pero no podemos contentarnos ante los intentos de nuevos gobiernos conservadores, como en Suecia, de desmembrar nuestro sistema social", afirmó. "Tenemos que trabajar día a día por una Europa más social con nuevos pasos que garanticen la igualdad real de las mujeres y los hombres", dijo.
El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, se comprometió a trabajar en favor de los derechos de los trabajadores.
El Manifiesto de Sevilla apoya el Tratado Constitucional europeo y exige la inclusión en éste de la carta de derechos sociales fundamentales. Además, la CES apuesta por el diálogo social, unos sindicatos más fuertes, un crecimiento sostenible y la solidaridad regional.
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