Gallardón se sube ahora al autobús

Primero fue el metro, cuando era presidente regional. Luego, la M-30 para soterrar los coches, ya de alcalde de Madrid. Ahora, Alberto Ruiz-Gallardón como candidato apuesta por el autobús. "El nuevo protagonista", anunció ayer, "será el autobús y el transporte público en superficie".

Gallardón se comprometió a construir 17 estaciones "intermodales" que faciliten la conexión de los autobuses con otros medios de transporte si gana las elecciones del próximo 27 de mayo. También planteó la construcción de aparcamientos disuasorios a las afueras de la ciudad. El alcalde detalló un ambicioso plan en el que se recoge la ampliación de la flota de autobuses en 250 vehículos, la mayoría de ellos ecológicos.

Entre las medidas que ayer avanzó el candidato popular destaca la creación de 11 lanzaderas en los corredores de acceso a Madrid, que facilitarán la comunicación con los intercambiadores de transporte y los nudos "intermodales" desde nueve aparcamientos disuasorios, que también construirá. El plan detallado ayer costará más de 300 millones, según un responsable municipal.

Gallardón propuso ampliar la red para llegar donde ahora no llega. Para ello, en el anillo exterior de la M-30 creará 15 líneas transversales de autobuses, que complementará con otras 15 que ya funcionan, para conectar los distritos del exterior. En el interior del anillo de la M-30 se establecerán otras cuatro líneas transversales que conectarán plaza de Castilla con la avenida de América, Tetuán con el paseo de la Castellana, Príncipe Pío con Legazpi y Manuel Becerra con Legazpi.

Otra de las propuestas más llamativas es la creación de dos líneas de minibuses eléctricos para acceder a las áreas peatonales, como Embajadores o el barrio de las Letras.