Bestiario ofrece ver de otra manera las bases de datos
La empresa crea geografías visuales para gestionar la información
Hacer visible, comprensible la complejidad, éste es el lema de Bestiario, una singular compañía radicada en Barcelona. Se trata de acceder a las bases de datos con más libertad que la disciplina lineal o arbórea que tradicionalmente proponen. Bestiario busca la capacidad relacional de los ítems y construye galaxias por los que navegar en las bases de datos. Ello, además de permitir la búsqueda de lo que se quiera, propone al navegante de estas galaxias la oportunidad de observar y sorprenderse por las relaciones que establecen los distintos ítems.
Detrás de Bestiario están tres personas de distinta procedencia y formación. José Aguirre es gestor cultural y emprendedor vocacional. Santiago Ortiz, artista y matemático, es parte del equipo de investigación y desarrollo de proyectos del MediaLab Madrid. Andrés Ortiz es arquitecto y se ha especializado en arquitectura de la información.
El concepto y los algoritmos de su propuesta los han aplicado en casos muy distintos. Una empresa de publicidad, DDB España, les encargó trabajar sobre su particular almacén de datos. Son archivos que recogen su gente de lo que ven en la calle, en los medios... un banco de signos que permiten el análisis social de comportamientos, modas. Tienen más de 2.000 y los asocian a etiquetas. Visualsing Universe, el programa de Bestiario, "potencia la capacidad relacional de los signos, los presenta de modo espectacular y los inserta en un universo visual que hace más cómodo el trabajo de los analistas y fomenta la intuición del análisis de los datos", comenta Santiago Ortiz.
Una aplicación visible del trabajo de Bestiario está en el museo MEIAC de Badajoz. Se les pidió una herramienta para ver la colección de fotos de Extremadura y su gente hasta 1936 olvidándose del concepto de catálogo. Quien hizo el encargo dio una referencia clara: Christian Boltanski, el fotógrafo y artista de la memoria, la infancia, la muerte. Y Bestiario propuso Mnemosyne, una consulta como un viaje a través de un mapa que permitía navegar por referencias temporales, geográficas y semánticas (por ejemplo, la niñez). Animados por el rendimiento de sus algoritmos sobre bases de datos modestas, ahora están en el empeño de aplicarlos a pozos de datos de más envergadura. Acudieron a Del.icio.us, el popular almacén de favoritos de Internet que los propios internautas valoran. Santiago Ortiz, sobre una lista de páginas de animación, levantó, más con su lado de artista que de gestor de datos, Neurozapping. Ahí el espectador sólo puede contemplar cómo la máquina va saltando de página en página, de etiqueta en etiqueta, construyendo un dibujo, una trama, una metáfora de las redes neuronales. Ortiz considera este ejercicio un ejemplo de neurosis de la aplicación, de onanismo informático ya que el espectador no puede intervenir. En el festival sevillano Zemos 98, en torno al asunto del control y la vigilancia, los propios promotores del festival crearon tres páginas en del.icio.us con referencias a webs de su temática. Hipercontrol^3 -así se llama el programa- relacionó todos los enlaces en un cubo en el que, a través del color, la ubicación y el sonido se suministran pistas sobre la cercanía o lejanía de las páginas en función de tres ejes temáticos previamente identificados.
En el festival barcelonés Off del Centro de Cultura Contemporánea se verá la versión 0 de 6pli.org. Irá indexando los contenidos de del.ici.ous y después saltará a Flickr. El proyecto intenta trabajar sobre redes sociales, donde cada individuo es un entorno de información, y mostrar las múltiples relaciones que se establecen en estos entornos. "No se trata de reemplazar la lectura lineal por otra, sino dar pasos fluidos para otro tipo de contemplación", comentan. Para ensayar su capacidad de manejo de cifras millonarias de datos, el departamento de investigación de Yahoo les ha suministrado 106.000 puntos que representan palabras empleadas en la búsqueda y que, como mínimo dos, llevan a una misma página. Más de dos millones de relaciones.
Para proteger la privacidad del buscador, Yahoo sólo les ha suministrado puntos, no palabras, pero en Bestiario ya están trabajando en el mapa de este mundo.
BESTIARIO: www.bestiario.org
Jugar con los genes
Bestiario tiene un lado didáctico. En octubre, deben tener lista para el proyecto educativo de la Fundación Telefónica una herramienta de creación colectiva de conocimiento a través del manejo de objetos multimedia. También para Fundación Telefónica, otra experiencia pedagógica, es Mitozoos. Un universo de criaturas muy simples en lo físico, apenas 10 trazos, pero de las que se tiene mucha información. El internauta puede crear una criatura con su código genético que determina su apariencia y conducta, controlar la alimentación, gasto energético y el acto de la reproducción. La mezcla de códigos genéticos dará lugar a una criatura más o menos superviviente lo que ayuda a planificar futuros acoplamientos y, en definitiva, la evolución de este universo hacia la diversidad o la homogeneidad, esta última mortal para la especie.
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