"Desde mi llegada, la Sinfónica ha dado un crescendo espectacular"

Llegó a la Orquesta Sinfónica de Galicia de la mano de Enrique Rojas. Después del rodaje del primer curso, el nuevo equipo rector dirigido por Víctor Pablo Pérez dispuso el aumento de velocidad necesario para el despegue. A partir de ese momento, los proyectos se multiplican.

P. ¿Cómo ve la evolución de la orquesta en estos 15 años?

R. Desde mi llegada hasta ahora, la Sinfónica ha realizado un crescendo profundo y espectacular. Primero hubo que reordenar la plantilla, revisar algunos de los contratos para buscar músicos mejores aun y ampliarla de 75 a 85 músicos. Luego ha ido adquiriendo una profunda madurez, a través de una disciplina estilística muy contrastada. La orquesta ha trabajado de forma muy profunda desde Mozart hasta Wagner, también muy intensamente Rossini, muy interesante técnicamente para una orquesta. Y ciclos completos de sinfonías: se ha hecho Brahms, todo Mahler, las nueve de Beethoven, casi todas las de Bruckner, muchísimas de Shostakovich, y eso no hay muchas orquestas en el país que lo hayan hecho. También todas las grandes obras del repertorio sinfónico-coral, muy atractivo para el público y para la orquesta, como los grandes réquiemes: Mozart, Verdi, Brahms, Britten. El Stabat Mater de Dvorak, Misas y Te Deum de Bruckner. Todo, trabajándolo de modo muy contrastado y específico. La orquesta ha trabajado durísimamente para saber tocar de forma diferente cada uno de esos autores.

"La orquesta ha trabajado durísimamente para saber tocar de forma diferente a cada uno de los autores que ha interpretado"

"El Festival Mozart ha adquirido un nivel de reconocimiento muy difícil de conseguir en tan poco tiempo; es un exponente de calidad"

"Ahora que ya hay un prestigio ganado, iremos a Brasil, Argentina, Chile y Uruguay para lograr mayor presencia internacional"

P. ¿Y la música de la tierra?

R. Ha habido gran atención hacia autores gallegos, tanto históricos como contemporáneos. De aquéllos, cuando toquemos De terra Galega, de J.J. Castro, no quedará ninguna partitura importante por interpretar. De los actuales, Groba y otros más jóvenes como Durán, Vara o De Paz han tenido encargos o se les ha estrenado obra; evolucionando, por tanto, en su técnica compositiva en estos años.

P. Háblenos de los distintos proyectos de la orquesta.

R. En cuanto al coro, se ha desarrollado en tres frentes: el mixto, el joven y el de niños. En el futuro, se estudiará con prudencia la creación de uno profesional de cámara que ayudara a lograr un nivel de gran calidad. Sería un sitio donde los mejores cantores gallegos puedan tener su trabajo. Y un sueño que se hará realidad, creo; pero prudentemente, por cuestiones de presupuesto. También querría ampliar la plantilla para dar cabida a los nuevos músicos que salen de nuestra Joven Orquesta, otro proyecto con frutos fantásticos.

P. Queda el Festival Mozart.

R. Desde poco después de nacer, adquiere un nivel de reconocimiento muy difícil de conseguir en tan poco tiempo: es un gran exponente de la calidad de la orquesta. Y Pesaro, que ha sido muy importante por su relevancia internacional. La orquesta ha sido tres años orquesta residente en el Festival Rossini, la primera y hasta ahora única española residente en un festival internacional de mucho fuste y dificultad.

P. ¿El futuro de la orquesta?

R. Para octubre hay prevista una gira por Brasil, Argentina, Chile y Uruguay. A lo largo del curso 2007-08, haremos el ciclo completo de las nueve sinfonías de Beethoven, a doble concierto. Para tener mayor presencia internacional, ahora que ya hay un prestigio ganado, tras Europa y América intentaremos Japón.

P. ¿Cómo se rematará el 15º aniversario?

R. Los días 5 y 6 de Mayo, con Carmina Burana y De Terra Galega, que creo que va a ser una sorpresa, porque está magníficamente escrita. Será un clásico del repertorio, como es la Impresión Nocturna de Gaos. Y El Oro del Rin, que se hace como una declaración de intenciones ante el futuro: tenemos el proyecto de hacer la tetralogía completa. La orquesta está madura y una orquesta que puede hacer la tetralogía se puede decir que ha entrado ya en la mayoría de edad.