Porro llevará a pleno el plan general de Vigo con la certeza de que será rechazado
El Consello da Xerencia de Urbanismo aprobó un dictamen negativo del documento
El PP había anunciado que sólo llevaría al pleno municipal el plan general de Vigo corregido en Política Territorial si tenía garantías de que sería aprobado. No lo será, según quedó claro ayer en el Consello da Xerencia de Urbanismo. Pasará por el pleno no por voluntad del grupo popular, que sólo podrá confirmar el rechazo al documento, sino por efecto de comedia de enredo en las votaciones de ayer. El PP defenderá el plan corregido, al PSOE seguirá resultándole muy corto, y BNG y Manuel Soto (PG) optarán por dejar el asunto para la próxima corporación.
En el Consello da Xerencia de Urbanismo se votaron ayer tres propuestas. La del grupo socialista proponía, para sumar su apoyo al plan general, aplicar las correcciones señaladas por la orden de Política Territorial de 19 de enero y, además, otras 37 enmiendas que vienen de atrás y amparan el voto contrario de los socialistas al plan aprobado el año pasado. La propuesta fue rechazada por los votos en contra de PP y PG y la abstención del BNG.
BNG y PG propusieron dejar el asunto sobre la mesa para que sea la próxima corporación la que lo resolviera. Fue rechazado con los votos de PP y PSOE (por primera vez los sumaron en un tema urbanístico) e, implícitamente, el asunto quedó emplazado a ser debatido en el pleno. Pero con una seguridad en el resultado, ya que el tercer asunto votado, la incorporación de las correcciones al documento del plan, sólo contó con la aprobación del PP. El BNG se abstuvo y socialistas y Manoel Soto votaron en contra.
Este resultado anticipa el que pueda producirse en el pleno, que se celebrará el próximo lunes. Los distintos portavoces subrayaron ayer que no habrá lugar a sorpresas. De manera que el documento no será aprobado (necesita mayoría absoluta) y, consecuentemente, tampoco podrá remitirse a Política Territorial para su aprobación definitiva. Es decir, quedará como tema estrella para la corporación que resulte elegida el 27 de mayo.
En esa corporación el PP anuncia que lo aprobará con mayoría suficiente, "por los favores que ahora ustedes nos hacen, gracias a sus incoherencias", afirmó el portavoz popular y concejal de Urbanismo, José Manuel Figueroa, dirigiéndose a nacionalistas y socialistas. Les acusó de mantener criterios distintos en Vigo y en la Xunta con respecto al plan de Vigo. El BNG considera que los cambios reclamados por Política Territorial castigan a las parroquias y el PSOE los estima insuficientes y, a día de hoy, ni siquiera aplicados.
El nacionalista Henrique Viéitez había acusado al portavoz popular de "retórica electoral". "Son ustedes los que gobiernan y han sido incapaces de generar un clima de confianza y de diálogo", afirmó para pedir que se retirara la propuesta de llevar el asunto a pleno.
Las alusiones a los criterios de legalidad y de oportunidad (en estas vísperas electorales) que concita el asunto fueron recurrentes por una parte y otra. También las consideraciones sobre si prevalecen los criterios partidistas sobre los técnicos. No es fácil discernirlo. Ni siquiera la intervención, imprevista y plúmbea, del gerente de Urbanismo, Xavier Rivas, pudo aclarar si las correcciones ordenadas por Política Territorial se han aplicado o, como sostuvo el socialista Mauricio Ruiz, se han hurtado en "un ejercicio de maquillaje". Rivas, para defender la correcta ejecución en el plan de Vigo, adujo referencias comparativas de edificabilidad con los planes de Santiago y Lugo. Pero ninguno de los dos ha sido aprobado por Política Territorial.
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