Máximo con reparos
La Bolsa española abrió esta semana con un nuevo máximo histórico en el Ibex 35, pero con la sensación de que mantener estos niveles no va a resultar nada fácil.
El Ibex 35 cerró en 15.020,80 puntos tras subir el 0,37%, aunque en los mejores momentos llegó hasta los 15.059,50 puntos, cuatro menos que el máximo histórico intradía y cuestión clave en el desarrollo de la jornada. El Ibex de los valores medianos subió el 0,60% y el de los pequeños el 1,14%.
El rebote registrado por el Ibex 35 frente al anterior máximo histórico puso nerviosos a los inversores a corto, ahora mayoría, al considerar que ese techo va a resultar difícil de superar en las condiciones actuales que, además, ayer eran inmejorables.
El conjunto de los mercados de valores de la eurozona se anotaba subidas superiores al 1% y la Bolsa de Nueva York abrió al alza ante unos datos económicos razonablemente positivos, aunque inferiores a lo esperado. La ganancia se quedó en un 0,86% para el Dow Jones. La llegada del Ibex 35 a la zona de máximos fue como la señal para empezar a vender, y ello con un ambiente externo muy positivo y con varias sociedades inmersas en posibles operaciones corporativas de indudable interés, al menos sobre el papel.
Los analistas llaman la atención sobre el próximo vencimiento de los contratos de opciones y futuros de este mes, que tendrá lugar este viernes, como una de las causas del nerviosismo y velocidad de actuación de muchos inversores y que está alejando a la Bolsa española del conjunto de los mercados europeos. La Bolsa de Francfort acumula una subida anual del 11,23%, mientras que el Ibex 35 gana el 6,18%, por debajo incluso del índice selectivo Euro stoxx 50, que ya sube el 6,29%.
La contratación en el Mercado Continuo se situó en 5.942,93 millones de euros, de los que 4.839,92 millones procedían del "mercado abierto".