Buenas noches y hasta pronto

Buenas noches, bienvenidos, el show de Miguel Ríos, se despide esta noche de la parrilla de Canal 2 Andalucía después de 13 programas. Aunque el número pudiera resultar temerario, Miguel está seguro de que "no ha traído mala suerte, desde hace años dejé de ser supersticioso". Pese a esto, tal vez para contrarrestar, Ríos reconoce haber hecho un programa que ha sido como "un trébol de cuatro hojas en el que el entretenimiento ha sido el tronco sobre el que han crecido la música en riguroso directo, la cultura popular, la sociedad civil y la energía del público en el plató".

Habla con la seguridad de haber hecho el programa que quería y de haberse divertido. Además, el formato elegido optó por uno de sus caballos de batalla, la música en directo. "Hay que animar a la gente de la televisión para que se emita mucha más música en directo. Es mucho más trabajosa, pero los artistas tienen que querer mostrar su talento en directo, con toda su autenticidad", confiesa, orgulloso de que a lo largo de los 13 programa hayan pasado por el plató 128 músicos repartidos en 16 bandas y 21 artistas de primer nivel que han aceptado su lema: "¿Cómo se toca aquí? Ni en play back ni en vídeo clip".

No ha sido la única apuesta personal de Miguel Ríos. Durante un concierto de Ángel González y Pedro Guerra en Granada, al rockero granadino se le ocurrió que en el formato del programa debería tener un lugar la poesía "con toda su dignidad". Para ello eligió al poeta Luis García Montero, que no dudó en ponerse al mando del Club de los poetas nuestros. "Una de las cuestiones más interesantes de la serie ha sido esta apuesta por la poesía. A Luis no le he descubierto yo como poeta, eso está claro, pero en el programa se ha podido ver que es valiosísimo como comunicador", asegura, a la vez que no duda en mandar un mensaje a la cadena. "Luis tendría que repetir esta experiencia. Canal Sur debería de plantearse hacer con él un programa en el que la poesía encuentre su espacio", aseguró.

Otro de los compañeros de viaje que han navegado con Ríos ha sido el pintor granadino Juan Vida. "Fue una de las primeras personas a las que le comenté el proyecto de la serie. Cuando supo que serían 13 programas me dijo que no habría ni para empezar. Ha sido verdad y eso es una buena señal", opina refiriéndose a la buena salud del arte en Andalucía, que se ha ofrecido en la sección Arte y seguido.

Poco amigo de las valoraciones generales, Miguel Ríos confiesa que ha sido una experiencia diferente con respecto a las series televisivas anteriores. "Mis dos trabajos anteriores para televisión se hacían sin público y tenían mucho montaje, lo que nos obligaba a grabar durante varios días. Por el contrario, este programa se grababa casi en tiempo real. Ha sido como dar un concierto a la semana y creo que ha habido mucha calidad".

Con respecto al final de la travesía, Miguel Ríos confiesa que no va a echar mucho de menos el barco. "No estoy para muchas televisiones. Voy a echar de menos a muchas de las personas que nos han acompañado y con las que he trabajado durante estos siete meses. Es posible que a algunos no los vuelva a ver. No me queda más que honrarme de su amistad". A partir de ahora, se pondrá a trabajar en un nuevo disco en directo que se grabará a lo largo de su gira americana.