Iberia reclama a TPG que concrete sus alianzas y garantiza la mayoría española

La nacionalidad de las empresas vuelve a cobrar importancia en las ofertas de compra sobre compañías españolas. El consejo de Iberia denegó ayer al fondo estadounidense TPG la posibilidad de acceder a información sensible con vistas a lanzar una futura OPA. Le reclama que concrete sus alianzas con aerolíneas y, en especial, con socios que garanticen la mayoría española en el accionariado de la compañía. La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, advirtió ayer que cambios en la propiedad de Iberia podrían provocar "que se reconsideren determinadas concesiones", en relación a los convenios con Latinoamérica.

Álvarez expresó abiertamente sus dudas sobre la puja en la que está envuelta Iberia, que incluye una posible OPA de Texas Pacific Group (TPG) pero también de otras compañías, como British Airways -actual accionista de la aerolínea española- y Lufthansa, que han aireado en las últimas semanas su interés por el grupo. La ministra afirmó en la Cadena SER que lo único que le preocupa ante la posible venta de Iberia "es la prestación del servicio, no de quién es la propiedad". Pero acto seguido dejó un aviso a navegantes: "Los convenios internacionales [sobre rutas aéreas] con Iberoamérica se refieren explícitamente a empresas españolas. Si Iberia pierde la españolidad perderá a su vez ese derecho y tendrá que replantearse las relaciones", dijo.

El Consejo de Administración de Iberia, que se reunió a media mañana de ayer, tomó buena nota de la posición de Fomento. Ante la solicitud por parte de TPG de "información corporativa, contable, fiscal y legal" con el objetivo de presentar una futura OPA a un precio de 3,6 euros por acción, la respuesta de Iberia fue tajante. El consejo acordó por unanimidad denegar dicha información hasta que el fondo estadounidense aporte información sobre sus alianzas.

El consejo no da información

"El consejo solicita a TPG más información sobre sus socios, en especial sobre si hay entre ellos compañías españolas y otras aerolíneas", afirmó una portavoz de Iberia. Las razones de esa reclamación van en la línea de las advertencias de la ministra. "Hay determinadas rutas que requieren mayoría de capital español en el accionariado, como en el caso de los convenios internacionales con Iberoamérica", dijo la portavoz. En algunas ocasiones, esos convenios se refieren sólo a la necesidad de que se trate de empresas europeas. Pero en la mayoría de los casos exigen mayoría española en el capital.

"Nadie va a comprar Iberia sin garantizar la mayoría española", según las mismas fuentes, "porque de lo contrario el grupo perdería una parte fundamental de su negocio, sobre todo en Latinoamérica". La semana pasada, el Ministerio de Fomento ya se dirigió a Iberia tras la presentación de la posible oferta de TPG. Y ya entonces Iberia aseguró al Gobierno que, incluso si se cierra la operación planteada por el fondo norteamericano, "se van a establecer una serie de criterios que mantendrán la españolidad" de la aerolínea.

Con la decisión del consejo, Iberia gana tiempo ante la posibilidad de que otras compañías entren en la puja. El núcleo estable del grupo español -en el que figuran Caja Madrid, el BBVA, El Corte Inglés y Logista- se ha mostrado receptivo a escuchar ofertas que supongan una prima significativa sobre la cotización actual, que ayer cerró situada en los 4 euros, con una caída del 1%.