Procesión simbólica contra el cierre de la compañía SAS

Unos 50 trabajadores de la compañía SAS, fabricante de componentes para automóviles y ex proveedor de Seat, marcharon el pasado jueves en una procesión simbólica por el centro de Abrera (Baix Llobregat) para protestar por la situación en que se encuentran, cuando ya ha transcurrido más de un mes desde el cierre de la planta de esta localidad y del inicio del encierro en la misma.

La procesión simbólica transcurrió sin incidentes y finalizó delante del Ayuntamiento, donde uno de los trabajadores afectados leyó un manifiesto reivindicativo. Los participantes en la procesión iban disfrazados de cofrades.

SAS cerró su fábrica de Abrera el pasado 2 de marzo sin comunicarlo antes a la Generalitat ni advertírselo a sus empleados. No fue hasta unos días más tarde cuando presentó, como es reglamentario, el expediente de regulación de empleo (ERE), que afecta a 210 personas.

La consejera de Trabajo de la Generalitat, Mar Serna, considera "inaceptable" el cierre unilateral decretado por SAS. "En el modelo de relaciones laborales del siglo XXI, que una empresa decida de forma unilateral parar la producción no me parece adecuado", declaró Serna.

La multinacional alemana SAS decidió cesar la producción de la factoría de Abrera, que realizaba el montaje de los salpicaderos de los actuales modelos Córdoba e Ibiza de Seat, tras no lograr el contrato para el ensamblaje del salpicadero del nuevo Ibiza, previsto para el 2008.

Recorte en Seat

Seat atraviesa por su propio proceso de recorte de producción y de personal. UGT, CC OO y CGT, los tres sindicatos presentes en el comité de empresa de Gearbox, filial de cajas de cambio de Seat, se adhirieron el jueves al acuerdo para reducir en unas 1.600 personas la plantilla del grupo en tres años, informa Efe. El ajuste se basa en medidas voluntarias, sobre todo prejubilaciones.

De los cerca de 140 afiliados de CGT en la planta de Gearbox en El Prat de Llobregat, participaron en la consulta más de 80, de los que sólo uno votó en contra del pacto y otros tres se abstuvieron, según fuentes de esta organización. Esta votación supone un preludio de lo que pasará presumiblemente entre los afiliados de CGT en el resto de centros de trabajo del grupo: la planta de la Zona Franca, el centro de recambios, la fábrica de Martorell (Baix Llobregat) y el centro técnico. CGT dio ayer por hecho que la mayoría de sus afiliados en Seat apoyarán el ajuste de personal.