Maxine H. Kingston apuesta en Galicia por el pacifismo
La violencia machista es "un problema cultural", afirma
Menuda, de voz suave y con una inconfundible melena cana, Maxine Hong Kingston es una de las personalidades con más fuerza del movimiento pacifista mundial, además de renombrada feminista desde que publicó, en los setenta, The woman warrior, un libro que se analiza en seminarios universitarios de todo el planeta. Kingston dictó ayer una conferencia fue la facultad de Filología y Traducción de Vigo.
Representante del feminismo moderno, Kingston se queda sin palabras cuando se le pide una explicación sobre la ola de violencia machista que asola Occidente, donde miles de mujeres mueren a manos de sus parejas. "Nunca he creído que sea un problema del hombre, sino un problema cultural". "Pero hay alguna esperanza en manos de las mujeres: hay una especie de chimpancés en la que, cuando los machos se pelean, las hembras les quitan las piedras y los separan, quizá en manos de las mujeres esté terminar con tanta violencia".
"Estados Unidos y el actual Gobierno iraquí tienen un acuerdo para explotar el petróleo de la zona", denuncia Kingston, que califica de "terrible" la situación. "La política exterior de Estados Unidos es simple militarismo", afirma. Según ella, "no necesitamos esto; se está favoreciendo a las empresas privadas, ahora Estados Unidos está construyendo en Irak 12 ciudades fortaleza con hamburgueserías, cines ... y seguridad privada".
De Europa sólo espera "que actúe como debería hacerlo Estados Unidos, deberíamos ir todos juntos a Irak con ayuda, la situación es desesperada". Kingston confiesa que en momentos difíciles como éstos "pienso qué haría Gandhi si estuviese vivo, y creo que en el caso de Irak él iría allí, reuniría a miles de personas e intentaría cambiar las cosas sin utilizar las armas".
Kingston acaba de publicar Veterans of war, veterans of peace, aún sin traducir al español, un trabajo que le ha llevado 15 años terminar. "Reuní a veteranos de guerra, entre ellos a una mujer que había estado en la Guerra Civil Española, unas 500 personas, y meditamos juntos". Ha recopilado historias de guerra, pero, en realidad, cree que son "historias de paz, porque intento explicar cómo encontrar la paz". Los beneficios de este libro, editado por Koa Books, se destinarán a construir escuelas en Vietnam y a financiar el movimiento feminista que lidera Maxine Hong Kingston, Code Pink, un grupo pacifista contra la invasión de Irak.
"En Code Pink nuestras movilizaciones reúnen a mujeres vestidas de rosa, que se ponen muy guapas y son muy amables, y pedimos eso precisamente a los gobernantes, que sean amables con los demás". Kingston lo tiene claro: sólo el diálogo podrá terminar con tanta violencia que asola el mundo.
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