Marionetas todo el año
La construcción del Centro Internacional del Títere de Tolosa arrancará en septiembre y concluirá a finales de 2009
Corría el año 1983 cuando el grupo vasco Txotxongillo inauguró el primer Festival Internacional de Marionetas de Tolosa con la representación de El principito. La muestra, organizada por el Centro de Iniciativas de Tolosa (CIT), una asociación cultural privada creada en 1967, en seguida se hizo un hueco entre el público. "A nosotros mismos nos sorprendió la respuesta que tuvo el festival y cómo se emocionaba la gente", recuerda su codirector, Miguel Arreche. Por eso, la pregunta surgió natural a las pocas ediciones: "¿El resto del año no puede haber algo?". Nació así la idea de crear un centro estable de marionetas en la villa guipuzcoana. Han tenido que pasar dos décadas para lograr el respaldo institucional y económico necesario y hacer realidad ese sueño. Los trabajos de construcción del Centro Internacional del Títere de Tolosa está previsto que empiecen el próximo mes de septiembre y acaben dos años después, a finales de 2009.
Ofrecerá una programación estable de espectáculos, exposiciones y talleres
El centro abrirá sus puertas en la plaza Euskal Herria, en un edificio de 3.600 metros cuadrados, repartidos en cuatro plantas, que en su día albergó el Palacio de Justicia. Las obras, que respetarán la fachada del inmueble, costarán seis millones de euros. Esa cantidad será financiada por el Ayuntamiento de Tolosa, la Diputación de Guipúzcoa, el Gobierno vasco, el Ministerio de Fomento y la Kutxa. La institución foral rubricó ayer mismo su participación económica, algo que ya han hecho el consistorio y el ministerio. Faltan por formalizar su colaboración el ejecutivo autónomo y la entidad de ahorros.
¿Qué contendrá el futuro centro? Para empezar, contará con una sala con capacidad para 250 espectadores. Aunque el aforo no sea muy elevado, el escenario será "muy grande" y estará "muy bien dotado", lo que permitirá programar tanto pequeños espectáculos como propuestas de medio y gran formato, según explica Arreche.
La idea de su equipo es organizar actividades y actuaciones para niños entre semana, y reservar el fin de semana para ofrecer espectáculos dirigidos a un público familiar y adulto. "La programación irá concretándose y creciendo en función del acierto del programa y de la respuesta del público", apunta.
Los viejos juzgados acogerán también un museo donde se podrá recorrer la historia de los títeres, su evolución en distintos países y las diferentes técnicas que existen para manejarlos. El festival tolosarra cuenta ya con un fondo de 700 marionetas, a las que se irán sumando más piezas en los dos próximos años.
El centro guardará además un espacio para exposiciones temporales. "Queremos montar tres al año, de un trimestre de duración cada una", concreta Arteche. Algunas se nutrirán de los fondos propios, que se mostrarán de manera monográfica, y otras se organizarán mediante intercambios con otros museos.
La nueva infraestructura cultural se completará con un centro de documentación, donde se reunirán todos los escritos recopilados durante el cuarto de siglo de vida del festival de txotxongilos, y con talleres para dar cursos tanto a profesionales y profesores como a niños y aficionados, con la posibilidad incluso de impartirlos vía Internet.
"Hay muy pocos centros en el mundo del tipo que nosotros hemos pensado", subraya Arreche. Y es que mientras en Europa existen centros que se ocupan "sobre todo" de la creación, el artista y la investigación, el equipamiento de Tolosa pretende "equilibrar" esa faceta con la atención al público e, incluso, volcarse "algo más" en el espectador. Para ello se han fijado en el centro de marionetas que existe en Atlanta (EE UU) o en el de Taipei (Taiwan).
El centro tolosarra espera recibir a 18.000 niños y 10.000 adultos al año. Arreche confía en que contribuya a "incrementar el reconocimiento social" del arte de las marionetas. Espera también que se convierta en un espacio "digno" donde puedan trabajar las compañías de títeres y en un rincón donde todas las personas interesadas en esta disciplina puedan encontrar la información deseada.
¿Y por qué ha habido que esperar tanto para hacer realidad el Centro Internacional del Títere de Tolosa, que será único en España? "Nosotros no hemos dejado de trabajar con la misma insistencia durante todos estos años. No son publicables algunos de los adjetivos que nos han atribuido, más fuertes que pelmas", asegura Arreche. El foco se centra en las instituciones.
"En este país hay avatares de todo tipo, que hacen más o menos fáciles las relaciones inter-institucionales. Ahora todo ha jugado a favor y, sobre todo, ha habido personas, como el alcalde [de Tolosa, Jokin Bildarratz,] y el diputado general [de Guipúzcoa, Joxe Joan González de Txabarri,] que han creído en el proyecto y lo han visto desde el principio como singular y diferente para nuestra provincia. Madrid también ha creído en él. Es decir, que se han dado las circunstancias favorables para que esto arranque ahora ya de manera imparable", añade.
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