_
_
_
_
Juicio por el mayor atentado en España

La policía siguió esporádicamente a cuatro de los procesados "más allá del 11-M"

Firme, templado, sin eludir una pregunta, el veterano inspector Francisco Javier Santaella relató cómo investigó "hasta más allá del 11-M" al grupo de supuestos radicales que se reunían en casa de la calle Virgen del Coro. El reducido grupo de agentes de asuntos islámicos de la Brigada Provincial de Información de Madrid sólo pudo hacer "seguimientos esporádicos" de los supuestos captadores de yihadistas que celebraban reuniones de adoctrinamiento en dicha vivienda. Entre esos, se encontraban cuatro de los procesados por el 11-M y el suicida de Leganés Serhane el Tunecino. La unidad de Santaella nunca fue reforzada. Ni siquiera cuando Bin Laden amenazó a España en 2003.

Santaella detalló la investigación sobre la casa en la que se reunían los hermanos Moutaz y Mohannad Almallah Dabas, Basel Ghalyoun, Fouad el Morabit o Abdelillah El Fadual (todos procesados) y El Tunecino. Empezaron a saber de ellos en marzo de 2003. Les llamó la atención las medidas de seguridad de la vivienda y el alto nivel de vida de sus moradores.

Más información
Un policía identifica a Bouchar como el islamista que escapó corriendo en Leganés

El trabajo no fue fácil. Eran pocos agentes y menos medios. Grabaron con una cámara de vídeo prestada y no podían vigilar a diario: "Les hicimos seguimientos esporádicos a los de Virgen del Coro, no de tal hora a tal hora de lunes a viernes... Semanalmente siempre. Pero más esporádicamente, nunca se suspendieron y se siguieron hasta que se detuvo a Basel y Fouad, más allá del 11-M". Santaella dio el motivo de ese tipo de seguimiento: "Nuestro grupo era muy reducido, íbamos casi siempre al límite".

Santaella subrayó que nunca tuvieron datos para detener, ni los vio el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4, Fernando Andreu. "Una alarma de atentado, o de este atentado, por supuesto que no tuvimos". Lo único que sabían es que Almallah había hablado de volar las Torres Kio. Para él fue "una fanfarronada".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_