Ronaldo: "No puede ser que Capello tenga todo el poder"

La relación entre Ronaldo y Fabio Capello, su ex entrenador en el Madrid, siempre se presumió tormentosa. Desde ayer, se sabe que era muy mala. Y que el origen del desencuentro es que al delantero nadie le explicó por qué no jugaba: "Para mí no había criterio. Hubo veces que me entrené mal, muy mal, fatal, pero otras, durante semanas seguidas, me entrené muy bien. No pasó nada. A veces me vine abajo", reconoció cuando se le preguntó en la Cadena Ser sobre cómo se sentía antes de abandonar el Madrid y marcharse al Milan. La mala relación con el técnico afectó también a su amistad con Ramón Calderón, el presidente: "Era mucho mejor cuando era amigo de un amigo mío fallecido, cuando jugábamos al golf, cuando era directivo...prefiero acordarme de eso. Como presidente no ha sido la mejor relación. Capello influyó en eso. De un momento a otro le dieron todo el poder, todo dependió de él, y eso no puede ser. Los jugadores tienen un historial...y no es que yo quiera el poder".

Ronaldo está herido. En Milán vive en un hotel, lejos de su familia, de su hijo, que se ha quedado en la capital. Y sigue pensando en el Madrid y en Capello.Le dolieron, no lo esconde, las circunstancias de su traspaso, en el mercado de invierno: "Con los médicos del Madrid y de la selección brasileña de acuerdo, decidí operarme de la rodilla. Luego, en el último momento [cuando se negociaba su traspaso en el mercado de invierno], me dijeron que sólo se haría si yo pagaba la operación. Para el mundo del fútbol era una cifra ridícula, 24.000 euros, pero es un punto de la relación que teníamos. No me lo creía. Pagué", dijo el ariete, que no escondió el mal recuerdo que le ha dejado Capello: "Cuando vi el Barça-Madrid, quería que ganara el Madrid, por mis compañeros, pero pensé: 'si gana el Madrid, gana Capello'. Y eso me jode".

El brasileño se sintió desprotegido en su relación con el entrenador. Acostumbrado a los tiempos en los que Florentino Pérez presidía el Madrid - "Sólo si vuelve Florentino igual lo haría yo, encantado de ayudarle en lo que haga falta; con otro, no"-, Ronaldo no encontró nuevos apoyos entre la directiva: "Mijatovic [director de fútbol] siempre se portó bastante bien, decía que creía mucho en mí, pero cuando tuvo que defender a los jugadores no estuvo. Hice todo lo que Capello pidió y él [Mijatovic] no hizo nada por mí". Puesto a hablar, Ronaldo desveló intimidades del vestuario. El delantero dejó a su "familia" sin despedirse. Y desveló los funcionamientos de la caseta cuando se le preguntó si creía que Emerson se había negado a jugar contra el Bayern de Múnich. "Con Capello, sin que lo pida él, tres jugadores de los que están en el banquillo tienen que salir a calentar cada seis minutos. Muchas veces hemos dicho 'no, si no lo pide el entrenador' [porque quiera hacer un cambio]. Pero Emerson no. Él no haría eso".