"Tengo muchas ideas"

Cannavaro sufrió una lesión en el músculo abductor de la pierna derecha, ayer, cuando participaba en el entrenamiento del Madrid. Debió retirarse de la práctica y los médicos del club comentaron que su recuperación para el partido de hoy sería complicada. El hombre fue sometido a tratamiento fisioterapéutico hasta bien entrada la noche. El zaguero, que no jugó ante el Getafe por sanción -fue expulsado la jornada anterior frente al Atlético en el Calderón- se resintió de unas molestias físicas que arrastraba en el abductor de la pierna derecha.

Cannavaro soñaba con su regreso a Alemania. Por varias razones. Primero, se trataba de su reaparición en el país que le vio levantar la Copa del Mundo el pasado verano. En campos como el Allianz Arena, el defensa napolitano cosechó el prestigio que le valió un Balón de Oro y el título de Mejor Jugador del Mundo de la FIFA. Luego, fichó por el Madrid y su trayectoria en él ha resultado decepcionante. Lo comprueban a diario los hinchas y lo admite el propio Cannavaro, que se muestra incapaz de adaptarse a las necesidades de su nuevo equipo. Con media temporada resuelta, la visita al campo del Bayern se convirtió en la mejor ocasión para que Cannavaro recobre el lugar que ha perdido. Así lo entendió él, que se preparó para afrontar la eliminatoria como si se tratase de un duelo personal. La lesión de ayer supone la constatación de que este año cualquier empresa que se proponga se le hará difícil.

Cannavaro se lesiona y puede perderse un duelo que encaraba como un reto personal

La ausencia de Cannavaro, si finalmente no puede jugar, despejaría las dudas que bullen en el cerebro de su entrenador, Fabio Capello. Por primera vez desde que empezó la temporada, el técnico se encontró ayer con una sobreabundancia de defensas. Tenía variantes para elegir. Sus preferidos para la zaga eran Torres, Ramos, Helguera, Cannavaro y Roberto Carlos. Le sobraba uno. Según dispuso a los jugadores en el entrenamiento, Helguera resultó el descartado. En el partidillo rodeó al cántabro de suplentes, como Salgado y Pavón. Enfrente colocó a Cannavaro con Ramos como pareja de centrales. Un indicio aparente.

Capello también alienta la idea de jugar sin extremos. Puesto que Higuaín y Robinho acarrean molestias, el técnico se plantea jugar con tres mediocampistas barriendo las inmediaciones de su defensa, situar a Guti por delante y a Raúl con Van Nistelrooy en la punta del ataque.

Las llegadas desde la segunda línea, frecuentes en el Bayern, causaron estragos en el partido de ida. Capello quiere evitar que hombres como Van Bommel, Hargreaves o Schweinsteiger lleguen desde atrás con posibilidades de disparar desde la frontal del área. Para ello medita colocar una barrera de amortiguación formada por tres medios centro: Diarra, Gago y Emerson. "Tengo muchas ideas para mañana [hoy], aseguró el preparador italiano, que recalcó que no ha llegado a Múnich "pensando en la defensa; tenemos que jugar como sabemos, como lo hemos hecho alguna otra vez".

Capello, que también lamentó la baja de Beckham, no cree que el Madrid llegue con los pantalones bajados según afirmaba ayer el sensacionalista Bild en su portada. "Estoy acostumbrado a que mucha gente crea saber más que nosotros. Estoy seguro de que se encontrarán un equipo con los pantalones bien arriba", zanjó.