Ejecutivo con sueldo

Manuel Atencia, tras dimitir como diputado en el Congreso por el PP, se dispone, esta semana, a entregarse de lleno a su nueva tarea como vicepresidente ejecutivo de Unicaja. Se supone, por tanto, que se dedicará de pleno a sus funciones ejecutivas dentro del grupo empresarial de la caja. También se integra en la Comisión de Inversiones. Y lo hace, tal y como ha manifestado, para "ser un instrumento al servicio de los malagueños".Una declaración de intenciones, claramente localista así como políticamente incorrecta para el manual de la casa que hace ascos a que se le encasille como una caja "oriental". De modo que le queda tarea por delante por lo que se estima que su presidente, Braulio Medel, habrá resuelto para entonces cómo encajarle en el organigrama de la caja, con retribución incluida, dado que abandona su condición de político en activo. Igualmente, el propio Medel tendrá más asimilado ya, el sobresalto que ha pasado con el zamarreón que le propinó el presidente del PP, Javier Arenas al optar por Atencia para los órganos de gobierno de dicha caja en detrimento de su fiel aliado, Mariano Vergara quien, a pesar del abandono sufrido por los suyos, continuará.

Después de los primeros momentos de aturdimiento, ahí lo tienen dando cuerda larga a Atencia quien, en pocos días, ha hecho más declaraciones sobre Unicaja y su futuro que el mismo Medel, parco en apariciones en la prensa. Tal vez esté todo atado y bien atado, máxime cuando todavía está por formalizar la labor concreta que se le ha de encomendar a un Atencia dispuesto a hacer carrera en Málaga, a lo mejor con la vista puesta en suceder, en un futuro, a Francisco de la Torre como candidato a la alcaldía. El PP se apresuró a cantar victoria una vez concluidas las beligerancias pero Medel no es amigo de la velocidad, precisamente, y es ahora cuando se juega en su terreno por lo que Atencia tendrá que armarse de paciencia para aclimatarse al singular "tempo" que impone su presidente.

Y es que el financiero parece no dispuesto a perder comba. Ahora se ha sabido que mientras le incordiaban los populares aunaba los intereses de importantes empresarios andaluces para que tomaran una significativa participación en el accionariado de Iberdrola. Un espléndido servicio a Ignacio Sanchez Galán, presidente de la eléctrica, con sede en el País Vasco, en su afán por no perder éste el control de la empresa ante el acoso de Florentino Pérez y Unión Fenosa. Se supone que tan generoso esfuerzo tendrá la debida recompensa a favor de los intereses de Andalucía. El asunto es de tal envergadura que a buen seguro que el "invisible" consejero de Economía, José Antonio Griñán estará al tanto de tan seria operación.