Un joven mata a otro en una reyerta por provocar a su novia

Un joven de 20 años mató de una cuchillada en el tórax a otro, de 26 y de nacionalidad colombiana, en una reyerta desencadena al filo de la medianoche del viernes en plena calle, en el centro de Alicante. El móvil de la pelea, según una nota oficial de la Comisaría de Alicante, fue que la víctima se dirigió a la novia del agresor de "forma descortés". El homicida fue arrestado a las pocas horas de cometer el crimen por los agentes de la policía.

La reyerta comenzó sobre las 23.50 horas en la calle General Pintos de la ciudad de Alicante. En ese lugar, según la policía, el fallecido, acompañado de otras personas, se dirigió a una joven que había en la zona. El novio de la muchacha y otro amigo le recriminaron su actitud, a su juicio, descortés, extremo que desató una pelea entre los dos grupos. En un momento de la trifulca, el homicida se encaminó hacia su coche y sacó un cuchillo de grandes dimensiones con el que asestó un único golpe a la víctima a la altura del pecho. Tras la cuchillada, todos los contendientes abandonaron a la carrera la zona. Instantes después, el herido murió en el lugar en el que quedo abatido, sin que los servicios médicos de urgencia pudieran hacer nada para salvarle la vida.

Tras el crimen, la policía montó un dispositivo por las calles adyacentes, que culminó momentos después con el arresto del amigo del agresor, F. C. M., de 21 años, con antecedentes policiales. Cuatro horas después, los agentes detuvieron al autor material del crimen, R. S. R., de 20 años y natural de Alicante.

La madre del joven asesinado manifestó a Efe que desconocía el motivo por el que su hijo fue agredido mortalmente. Esta mujer, la colombiana Arcilia Muñoz Cardona, explicó que su hijo trabajaba con ella en el bar Puerta del Sol, de su propiedad, y que hacia la medianoche la acompañó al domicilio familiar sin que notara nada que se saliera de la normalidad. Unos diez minutos después de que su hijo la dejara en casa para regresar al bar, le llamaron para avisarle de que se encontraba herido y relató que cuando llegó al lugar ya había fallecido. La mujer explicó que viven en Alicante desde hace seis años y que su hijo tenía una vida normal.