El bajo coste conquista los cielos

Las líneas aéreas de bajo coste han roto definitivamente la hegemonía de las compañías tradicionales en los aeropuertos andaluces. El pasado 2006, la aerolínea británica Easyjet desbancó por primera vez a Iberia en el aeropuerto de Málaga, el cuarto más importante de España, con algo más de 13 millones de viajeros anuales. La empresa naranja transportó desde y hacia Málaga 1,63 millones de pasajeros frente a los 1,34 logrados por la compañía de bandera española, relegada a la segunda posición, por delante de Spanair (952.669 viajeros). Además, la cuarta, quinta y sexta posición del principal campo de vuelo de Andalucía las ocupan también líneas de low cost: Monarch (920.000 viajeros), Air Berlín (670.024) y ThomsonFly.com (615.290).

El AVE a Málaga restará un 30% de cuota de mercado en pasajeros y vuelos

Cinco años antes, el panorama del aeropuerto malagueño era bien diferente. En 2001, Iberia, con 1,42 millones de pasajeros doblaba a sus inmediatas rivales, Spanair (666.271) y Monarch (611.880). Easyjet, que opera en Málaga desde el año 1999, ocupaba entonces la quinta posición (441.957 pasajeros) y Air Berlín, la duodécima.

"El hecho de que una aerolínea de bajo coste haya desbancado a Iberia no sólo significa un éxito para Easyjet, sino para todo el sector del bajo coste", asegura Arnaldo Muñoz, director general de Easyjet para España y Portugal.

Las compañías de bajo coste están echando fuertes raíces no sólo en Malaga sino en el resto de los aeropuertos andaluces. En Sevilla, con 3,85 millones de viajeros anuales, Iberia conserva un sólido liderazgo, con 1,23 millones de viajeros frente a los 503.303 de Air Europa. Sin embargo, entre las diez principales aerolíneas del aeropuerto de San Pablo tres son compañías de low cost: Vueling, Ryanair y Air Berlín.

La presencia de las líneas baratas es también muy palpable en los aeropuertos de Granada, Almería y Jerez. En este último aeropuerto, la compañía irlandesa Ryanair, con 291.416 viajeros se acerca a Iberia, que encabeza la lista con 384.526 viajeros anuales. En Almería, Iberia sigue líder, aunque sus cuatro seguidoras, Easyjet, Ryanair, Monarch y Air Berlín son también de bajo coste.

Rafael Fuentes, gerente de la Sociedad de Planificación y Desarrollo (Sopde) de la Diputación de Málaga y experto en turismo, señala que el auge de los vuelos de bajo coste es una "realidad del mercado" que ya se ha visto en otros destinos turísticos como Baleares, Canarias, Alicante o Barcelona. Fuentes sostiene que "el gasto de un turista que usa las líneas de bajo coste es menor que el que usa las líneas regulares, pero no todo van a ser turistas que vienen a hoteles de cinco estrellas a jugar al golf. Tenemos que consolidar la cuota de mercado del bajo coste, en el que también hay mucha gente que prefiere ahorrar en el precio del billete para gastar más en el lugar de destino".

Otro competidor que se le presenta a corto plazo al aeropuerto de Málaga es el tren de alta velocidad. El gerente de la Sopde estima que con la llegada a la capital costasoleña del AVE, el tren le quitará al avión entre un 30% y un 35% de cuota de mercado en pasajeros y vuelos.

El director de Easyjet destaca también el crecimiento que están experimentando los pasajeros de negocios en su aerolínea. "De hecho, gran cantidad de nuestras rutas desde Málaga corresponden con los principales centros de negocios ingleses, así como Berlín, Milán o Ginebra".

No obstante, el perfil del viajero de bajo coste es un "turista urbanita que aprovecha los precios y destinos para hacer escapadas de fin de semana o para estancias cortas en Europa", afirma Arnaldo Muñoz.

Por su parte, Ángel Ruiz, presidente de la Asociación de Agencias de Viaje de Andalucía, ve con cierto optimismo el despegue de los vuelos de bajo coste, que tiene un efecto democratizador del viaje. "Por un lado hace que gente más joven y con poder adquisitivo más bajo se incorpore al turismo. Este cambio de sistema de mercado hace que la gente viaje más lejos porque empieza antes a viajar. Antes el viaje de bodas era a Canarias, ahora se va a Bali", constata.