"El cheque británico es una distorsión para la UE"

Dalia Grybauskaitè (1956, Vilnius, Lituania), economista formada en Moscú, Leningrado (Rusia) y Georgetown, (Estados Unidos) es la comisaria responsable del presupuesto comunitario e impulsar su reforma. Grybauskaité aboga por un cambio radical en la estructura del gasto de la UE para primar, la investigación, la educación, la innovación y la política energética.

Pregunta. El presupuesto europeo es cada vez más raquítico. El gasto por persona se reduce desde 2004 y continuará disminuyendo hasta 2013. ¿Qué piensa hacer la Comisión ante esta situación?

Respuesta. Es verdad. Después de la ampliación tenemos el mismo presupuesto. Alrededor del 1% del PIB de la UE. Ahora tenemos lo mismo para 27 Estados. Además el presupuesto no refleja las prioridades de la Unión ante los desafíos de la globalización.

P. ¿Cuál es el problema?

R. Actualmente el presupuesto sólo considera dos importantes políticas: la agricultura y la cohesión, que en conjunto se llevan el 80% del gasto total.

P. ¿Cuáles serían sus prioridades para un presupuesto ideal?

R. Tenemos que hacer un presupuesto pensando en el siglo XXI. Si considero las presiones de la globalización y el lento crecimiento veo otras prioridades. La primera sería la investigación y la innovación. Después, la educación y el Medio Ambiente y una política energética común.

P. Pero estas políticas que propone fueron precisamente las que más se recortaron en el último presupuesto en diciembre de 2005.

R. Pero creo que deberíamos estar contentos con que Europa haya comprendido finalmente que se debe cambiar el presupuesto radicalmente.

P. ¿Cómo se puede cambiar esta mentalidad?

R. Con transparencia. Hay que explicar quiénes son los beneficiarios reales de las ayudas. ¿Cómo se puede explicar que en algunos países el 80% de las ayudas agrícolas se las lleven el 15% o 20% de las personas o ricos monopolios.

P. La reforma del presupuesto coincide con la reforma de la Constitución. ¿Cuál debería ser el debate prioritario?

R. Éste es el problema. Nosotros preferiríamos primero solucionar las políticas, es decir la Constitución, y después el presupuesto. Pero es muy probable que los dos asuntos vayan en paralelo. La Comisión está obligada a presentar una propuesta de reforma en 2008 o a principios de 2009.

P. Las discusiones están muy dominadas por las peleas sobre qué Estado saca más o menos dinero de la UE. ¿Cómo se puede superar esta situación?

R. En la cumbre de Fontainebleau en 1984, se acordó compensar al Reino Unido con un cheque porque pagaba mucho más de lo que les correspondía en relación a su prosperidad con relativa. Actualmente la relación entre la riqueza y lo que aportan los distintos países está bastante equilibrada, excepto en el Reino Unido. Entonces tenía una renta por debajo de la media comunitaria, pero ahora es del 115% de la media y sigue recibiendo el cheque. Esta excepción como la de Holanda, implica una falta de transparencia.

P. ¿Tiene sentido que España aporte más de 750 millones de euros al cheque británico?

R. El cheque británico es una distorsión para el cálculo de los recursos propios de la UE. Aunque España es un país relativamente rico es una distorsión, como lo es también para países como Bulgaria y Rumanía que también pagan al Reino Unido aunque su nivel de renta se sitúe por debajo del 40% de la Unión.