Vuelos intercontinentales desde Manises
El aeropuerto de Valencia -en Manises- ha pasado en poco tiempo de ser un recinto con poca oferta a vivir un auténtico boom de la mano de las líneas de bajo coste. El aeródromo valenciano cuenta ya con conexiones con 30 ciudades distintas y sigue aumentado esta cifra. Y lo que es más importante, Manises va a realizar vuelos interoceánicos, un escenario impensable años atrás. Para ello, el Ministerio de Fomento ultima la ampliación de la pista de aterrizaje y la remodelación del aeropuerto. José Salinas, presidente de Turismo Valencia Convention Bureau, explicó ayer que la capital valenciana contará con una ruta a Montreal a partir de la primavera. El vuelo lo operará la compañía Air Transat, considerada de bajo coste. La experiencia no quedará ahí y la intención, de hecho, es potenciar la vinculación aérea entre Valencia y Norteamérica.
Junto a este salto, Valencia seguirá aumentando su oferta europea. Sólo esta primavera el recinto aumentará los vuelos a Alemania, con París y con algún otro punto más de Francia. Salinas aseguró que Valencia se ha convertido en la sexta población turística española y en la tercera en lo que afecta al turismo nacional. Buena parte de esta posición la ha facilitado el bajo coste. En 2010 la intención es que la ciudad sea visitada por dos millones de personas.
Sobre aeropuertos habló también ayer el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, quien expresó en Fitur su deseo de que en un plazo de entre dos y tres años el aeropuerto que se construye en Vilanova d'Alcolea (y que cuenta con un expositor propio) logre el nivel y el tráfico de pasajeros de otros como Reus y Girona. Estos dos recintos han disparado su actividad en los últimos años de la mano de los vuelos de bajo coste. Fabra se mostró convencido de que el aeropuerto "marcará un antes y un después" en la economía de la provincia y no dudó en asegurar que la infraestructura será "la revolución turística" para Castellón. Hay, dijo, 200 millones de europeos como potenciales clientes.
Quienes ayer no tuvieron mucha suerte fueron los moros y cristianos que estaba previsto que desfilaran en el espacio de Costa Blanca. La fuerte seguridad organizada alrededor de la visita que cada año realizan los Reyes de España a la feria (y que en esta edición pasó por la Comunidad Valenciana) impidió la entrada de las armas que acompañan a estas comparsas. Finalmente, sólo participó en la fiesta del patronato de turismo de Alicante una banda de música.
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