"No tendríamos vida familiar"

Las urgencias del complejo hospitalario de Jaén echan humo a las 16.30. "Es un día normal", apunta el médico de familia Antonio Martínez Cañamero (Jaén, 1965) restando trascendencia a la saturación de las obsoletas instalaciones hospital, por donde pasan a diario una media de 250 pacientes. Antonio empezó su jornada laboral a las 8.00 y, tras un turno de siete horas que concluyó a las 15.00, enlazó con una guardia remunerada por la tarde y noche. "Aún no he tenido tiempo ni para comer", dice, con la normalidad de quien asume esta circunstancia como algo consustancial a su trabajo.

Antonio es médico eventual del SAS desde 1995 y uno de los 30 que trabajan en las urgencias del hospital, donde hasta ahora los facultativos trabajaban por la mañana y, cuando les tocaba, hacían guardias de tarde y noche remuneradas, un incentivo adicional para aumentar sus 2.000 euros mensuales de sueldo base.

A partir del 1 de febrero, el SAS pretende que trabajen turnos de 12 horas, dejando de cobrar las guardias. "Es un problema muy serio que no estamos dispuestos a asumir, pues, al margen de la pérdida de poder adquisitivo, lo más importante es que apenas tendríamos vida familiar", se queja Antonio Martínez, que reivindica "el mismo trato que reciben los médicos especialistas", que sí cobrarán 200 euros por las guardias de tarde y estarán localizables en sus casas por las noches.