Reacción de última hora

El Ibex 35 consigue cerrar en positivo por cuarta semana consecutiva al ganar el 0,21% y después de superar fuertes presiones vendedoras ligadas al mercado de opciones y futuros, al tiempo que el descenso del precio del petróleo despeja el terreno de presiones inflacionistas a medio plazo.

La Bolsa española consigue cerrar con ganancias una semana que se presentaba llena de problemas por la fuerte presión vendedora procedente del mercado de opciones y futuros.

El Ibex 35 logra una subida del 0,21% y cierra su cuarta semana consecutiva de ganancias en 14.397,90 puntos, aunque en algunos momentos de la sesión del viernes caía hasta los 14.182,00 puntos, sólo un 0,25% por encima del nivel de apertura del ejercicio.

La semana comenzó con un discreto avance del mercado que, no obstante, situó al Ibex 35 en un nuevo máximo histórico de cierre con 14.416,70 puntos. El martes el mercado mantuvo la orientación alcista durante el tiempo suficiente para marcar un máximo histórico intradía en 14.482,60 puntos, pero a partir de ese momento comenzó una fase vendedora cuya causa parecía estar, en principio, en el propio mercado y en su incapacidad para superar limpiamente la resistencia de los 14.440 puntos. Los analistas comenzaron a darle más importancia a los soportes y los inversores se mantuvieron a la expectativa, lo que provocó tres descensos consecutivos que culminaron en la mañana del viernes, cuando el Ibex 35 llegó hasta esos 14.182,00 puntos.

En ese nivel se produjeron numerosas operaciones institucionales, con 6.100 millones de euros negociados en el "mercado de bloques", que tuvieron un efecto beneficioso sobre el conjunto de la Bolsa, pues dieron paso a la recuperación de más de 200 puntos en el Ibex 35, el 1,52%, y a la cuarta subida semanal consecutiva.

El ambiente de fondo para el conjunto de los mercados de valores estuvo definido por el descenso del precio del petróleo y los indicadores económicos, sobre todo los estadounidenses, que en algunos momentos sirvieron de justificación para algunos altibajos.

La inflación en la eurozona se situó en 2006 en el 1,9%, lo que resta posibilidades a nuevas subidas de los tipos de interés, aunque desde el BCE se ha dicho que se sigue vigilando de cerca la evolución de la inflación para evitar presiones a medio plazo.

En Estados Unidos se han publicado varios indicadores que apuntan hacia una nueva recuperación de la economía tras el bache de los últimos meses del año pasado. Los índices de actividad industrial y de producción muestran alzas significativas, así como los precios industriales, lo que impedirá muy posiblemente la esperada rebaja de los tipos de interés.

La media de contratación del Mercado Continuo fue de 6.583,83 millones de euros, con 4.048,74 millones en el "mercado abierto".