El incendio de un piso ocupado por indigentes causa 41 intoxicados en Leganés

Un incendio en un inmueble de Leganés causó 41 intoxicados leves en la madrugada de ayer. El propietario de la vivienda llevaba dos meses sin aparecer por ella y, según los vecinos, en el piso incendiado residía desde entonces un grupo indeterminado de indigentes. Las personas que en el momento del incendio ocupaban la vivienda se dieron a la fuga. El resto de pisos se vieron afectados por el humo y los vecinos tuvieron que ser evacuados por las ventanas con la ayuda de autoescalas. Treinta de los afectados fueron trasladados a hospitales del sur de Madrid.

Sobre las 5.30, las llamas empezaron a salir del bajo del número cuatro de la calle de la Virgen del Camino, en Leganés. No se sabe cuánta gente había en el piso ni qué originó el fuego. Y no parece que vaya a saberse pronto, porque las personas que en ese momento estaban en el piso salieron corriendo y no se les ha identificado. Según los vecinos, quienes les dejaron en medio de la madrugada a merced de las llamas eran indigentes que vivían en el piso desde que, hace dos meses, su propietario fuera ingresado.

"Ahí vivía desde hacía 30 años Pedro. Un hombre que nos ha traído muchos problemas. Una vez ya se incendió un colchón en su casa", explicó Félix Lázaro, presidente de la comunidad de vecinos. "Hace dos meses se rompió la cadera y lo tuvieron que ingresar. Desde entonces, en la casa entran y salen todos los borrachos y drogadictos del barrio", añadió. La policía y el Ayuntamiento de Leganés no lograron ayer contactar ni con el propietario ni su familia para confirmar estos datos.

Media hora

Cuando los primeros vecinos se percataron del incendio, llamaron a los bomberos y permanecieron encerrados en sus pisos cubriendo las puertas con toallas mojadas. "Han tardado más de media hora en llegar, y eso que el parque de bomberos está aquí al lado", denunció Juan Manuel Ávila. Este vecino, que vive en el primer piso, tuvo que descolgar a sus dos hijos y a su mujer por la ventana. "Al ver el incendio por la mirilla, ya no quise ni abrir la puerta", explicó.

Los ocupantes del piso huyeron dejando la puerta abierta, y las llamas del piso incendiado crearon una barrera en la salida del inmueble. La mayoría de vecinos tuvieron que ser desalojados con las autoescalas de los bomberos por las ventanas. "Hemos terminado de controlar el siniestro sobre las ocho y media de la mañana", dijo el oficial de bomberos Pablo Peñalver. Las causas del incendio, según los bomberos, serán muy difíciles de esclarecer. Pero al originarse en el salón, podría ser un electrodoméstico como una televisión o una estufa.

Al tratarse de un bajo, el humo del incendio subió por el hueco de la escalera y afectó a las 15 viviendas de este inmueble de cuatro plantas. Del total de 41 heridos, seis fueron dados de alta por el SUMMA en el lugar de los hechos, y 35 fueron trasladados a varios hospitales del sur. Entre ellos había nueve menores. "A mí me han llevado al hospital, pero me han hecho un análisis de sangre y me han dado de alta en dos horas", explicó Enrique Gil, uno de los intoxicados. La mayoría fueron dados de alta ayer,

Al mediodía, una dotación de bomberos permanecía todavía en el inmueble para terminar de analizar el alcance de los desperfectos. "El edificio no está dañado. El incendio sólo ha afectado al cuadro de luz y algunos teléfonos, pero el agua y el gas están intactos", explicó el concejal de Seguridad Ciudadana y Hacienda de Leganés, Antonio García. Este concejal aseguró que pronto terminarán los trabajos de limpieza y el piso será precintado para que los vecinos no vuelvan a tener problemas parecidos. Según García, a diferencia de lo que sostienen los vecinos, el tiempo en que los bomberos tardaron en acudir al lugar de los hechos fue "muy poco".

Según la mayoría de inquilinos del inmueble, los ocupantes de la casa donde se originó el incendio eran conocidos del propietario. "Le debieron quitar la llave o vete a saber qué. Esto era un hogar de indigentes. El cura de una parroquia de Leganés nos los mandaba a todos. 'Id a Virgen del Camino, que ahí podéis dormir'. Como me lo encuentre...", decía muy enfadado Juan Manuel Ávila.