Una Nochevieja bajo el signo del hastío

Una vez más, la programación del último día del año no deparó sorpresas. Sólo las dos cadenas más nuevas -Cuatro y La Sexta- se esforzaron por salirse de las fórmulas trasnochadas.

TVE-1. Fatiga de materiales

El presentador de las campanadas (Ramón García) es ya más famoso por dar las campanadas que las campanadas que da. Pase. ¡Pero la gala! Los materiales de este tipo de eventos ya se han fatigado. El juego cansado de Julio Iglesias con su propio play back y los esfuerzos de Paulina Rubio para identificarse con un micrófono que la obligaba a moverse como si fuera Toulouse Lautrec salieron por la pantalla como la invitación a un bostezo. Los presentadores (Mar Saura, Bertín Osborne, Carlos Baute) alimentaron la escenografía con tópicos sobre la amistad y el amor. La gala fue precedida por un monográfico sobre la corrupción, de Cruz y Raya. En el monográfico estos dos grandes humoristas se aturden a sí mismos. Tuvieron a mano una posible gran contribución, la de Josema Yuste (de Martes y Trece), pero no le dejaron ser más que un figurante. Y pusieron a Miguel Rellán (gran actor) al frente del juicio contra 2006. El juicio les hubiera dado más de sí. ¿Lo mejor? El desayuno sin palabras de Pepa Bueno (la conductora de Los desayunos de TVE) con ZP. La novedad fue Bueno, que hizo una interpretación magnífica de su encuentro con el presidente. La joya de la noche.- JUAN CRUZ

ANTENA 3. Casas reales

A las diez, Antena 3 empezó un especial Homo zapping news que a veces se llamaba Homo gazapping. Las imitaciones eran las de la marca José Corbacho, que hacía de Matías Prats Jr., con toda la rancia prosopopeya de ese presentador. Momentos estelares: una burla de la más eterna pareja heredera, es decir, Carlos y Camilla, que parecía indicar que aquí sólo nos metemos con las cabezas coronadas de los demás. Pero no. Con un par, Corbacho hizo bromas sobre nuestra Casa Real; un monarca ebrio cantando "Borbón Borbón" (que rima con bourbon), y otro, de un grimoso amaneramiento, largando un discurso, mientras se mencionaba el apellido de Marichalar. En '¿Cómo sería el sorteo de Navidad si lo dirigiera Isabel Coixet?, la realizadora catalana sacaba a dos niños tercermundistas que daban pena, mientras que el mismo sorteo dirigido por Amenábar era terrorífico y con el inevitable Bardem paralizado en una cama. Las campanadas de la Puerta del Sol quedaron algo cutres, como realquiladas, pero luego venía la gala, intercalada de apariciones de estrellas de la casa: propaganda descubierta.- VICENTE MOLINA FOIX

CUATRO Leches de hormigas

Como si quisieran darle la razón a la noticia de que "España necesita importar sepultureros", los responsables de enterrar el año contrataron a dos hormigas y a un presentador disfrazado de Ramón García. Las hormigas se llaman Trancas y Barrancas y colaboran en El hormiguero, programa que se ha ganado la fidelidad de una audiencia con ramalazos adolescentes, escatológicos y gamberros quedisfruta del disparate. Si el año pasado Eva Hache compartió uvas con dos guiñoles, este año ha sido Pablo Motos el encargado de dialogar con las hormigas animadas y resolver un formato que, para las cadenas con aspiración de ser alternativa, es más trámite que apuesta. Después de un especial que consagró la Operación Malaya como el campanazo del año, Motos lidió con los ripios de las hormigas. Tanto él como los insectos parecían ser conscientes de que las uvas son una excusa para facturar anuncios como ese de leche en el que varias mujeres, en solemne armonía lactante, entonan You never walk alone, una canción que destila este mensaje: por muy solos que estemos siempre habrá una televisión que nos amamante. O, en su defecto, unas hormigas.-SERGI PÀMIES

TELE 5. Maratón vago

Se diría que los programadores habían pasado la tarde corriendo en la San Silvestre Vallecana, una masiva carrera popular que cruza el centro de Madrid en el día más intempestivo del año. No recuerdo una velada de Fin de año más perezosa y cansina que la que ofreció esta cadena, tirando de archivo y ofreciendo unas variétés en realidad nada variadas. Los anuncios entre canción y canción resultaban más trepidantes, aunque hay que reconocer que en un podio bailaba a veces Boris Izaguirre, levantando levemente el interés morboso. Así antes y después de las uvas. Quizá para compensar tal racanería, Tele 5 trasladó a sus presentadores (los tres protagonistas de Yo soy Bea) a la Ciudad de las Artes y las Ciencias en Valencia, pero fue peor el remedio que la vaguedad, porque aquel hermoso paraje marciano diseñado por Calatrava parecía desierto de público, con lo que las campanadas resonaron como doce toques fúnebres. Así que hice un zapping ilegal en la undécima uva a TVE-1, pero este año la capa española de Ramón García no dejaba ver si había bosque o no en el tanga de Anne Igartiburu.- V. M. F.

LA SEXTA. Uvas paródicas

Anunció sus primeras campanadas con el lema: "Prometemos solemnemente no hacerte reír mientras intentas comerte las uvas", y casi lo lograron. Patricia Conde y Angel Martín se ajustaron a una fórmula descreída de campanadas pero sin dinamitarla, que es lo que parecía pedirles el cuerpo. Antes, el espectador pudo recuperar el tono de Conde-Martín-Rubio-Nadal en un Sé lo que hiciste el último año que eligió al empleado del año (Pilar Eyre profanando la tumba de Jesús Gil) y despellejó a otros programas que, a su vez, viven del desuello. No deben sentirse culpables: ya se sabe que quien roba a un ladrón... SLQHEUA completa un ciclo: hay quien se hace famoso por salir en la tele, programas que se ganan la vida despellejando a estos famosos y otros que, con o sin condescendencia, se ganan la vida despellejando a los que se ganan la vida despellejando a los famosos. Las campanadas, pues, fueron convencionalmente paródicas (el modelo de TVE acaba estando presente por acción o por parodia) e incluyeron el mismo comecocos devorador de uvas que, si la noche no me confundió, también utilizó Cuatro. Lo mejor fue cuando, tras la novena campanada, Angel Martín dijo: "Podríamos dejarlo aquí". Pero el tiempo, inexorable, prosiguió. - S. P.