El presidente recibe el apoyo de todos los barones del PSOE

La consternación se posó ayer en todas las federaciones del PSOE tras el atentado de ETA, al tomar conciencia de que el proceso de paz puede haber tocado fin. El mazazo, como lo definió un miembro de la ejecutiva federal, y la condena a ETA, fue en paralelo a muestras explícitas y unánimes de apoyo al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, de los barones territoriales del partido. De manera directa y, sobre todo, a través del secretario de organización del PSOE, José Blanco, los responsables de las federaciones socialistas telefonearon para mostrar su "solidaridad" con el Gobierno.

En estos momentos el PSOE muestra a Zapatero el mismo apoyo que le ha brindado desde que empezó el camino hacia un posible fin dialogado de la violencia. En todas las reuniones del Consejo Territorial y del Comité Federal los dirigentes del partido han dado su aval a Zapatero para que "intente" el fin dialogado de la violencia.

En todas las reuniones Zapatero, no obstante, ha recibido de su partido un segundo mensaje: si el proceso fracasa, será "por culpa de ETA".

Los dirigentes territoriales del PSOE señalaron ayer que ahora solo cabe "contundencia" contra la banda terrorista, según fuentes de la ejecutiva federal. En efecto, Blanco, tras conversar con Zapatero, con la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega y con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, trasladó al partido que la condena sin paliativos por el atentado era lo único que cabía ante estas circunstancias.

Confianza en el Gobierno

En nombre de los socialistas madrileños, por ser Madrid el lugar del atentado, y recogiendo el sentir del resto de los dirigentes socialistas, Rafael Simancas, líder del PSM-PSOE, expresó su solidaridad con los ciudadanos heridos por el atentado y mostró su "absoluta confianza en el Gobierno, así como todo el respaldo a las decisiones que pueda tomar para responder a estos hechos".

Antes de las diez de la mañana la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE emitía un comunicado en el que declaró "la incompatibilidad de la violencia con la política". "El atentado es incompatible con el alto el fuego y el proceso de diálogo para acabar con el terrorismo; hoy es un mal día para los españoles y para la paz", señala el texto socialista. El apoyo se reiteró en la reunión de la ejecutiva federal de hace una semana y hace un mes el comité federal lo volvió a hacer.

Además, el PSOE "exige a la izquierda abertzale que condene este atentado porque nunca se conseguirá ningún beneficio político violentando la normalidad democrática". Y continuó: "ETA también lo sabe y no puede ni debe olvidarlo, y también debe saber que todo el peso de la ley caerá sobre los autores de la colocación del coche bomba".