La acusación sostiene que el vigilante de la familia Tous actuó con "alevosía"

Luis Andrés González, abogado del ciudadano albanokosovar muerto a tiros por el jefe de seguridad y yerno de la familia Tous, Lluís Corominas, sostiene que éste actuó con "alevosía", ya que realizó dos disparos "por la espalda y con superioridad de medios". En su informe de alegaciones contra el recurso presentado por el letrado Carlos Bueren para pedir la libertad de Corominas, Andrés sostiene que el vigilante es autor de un homicidio consumado y de otro en grado de tentativa. Según el abogado, con uno de los disparos trató de alcanzar al acompañante de la víctima y presunto asaltante de la casa de los Tous, Kasum Dulkhai.

Para que un homicidio sea considerado asesinato -y, en consecuencia, sea objeto de una pena mayor- es necesario que exista un agravante, entre ellos el de alevosía. Es decir, que el responsable del crimen actúe de forma intencionada y evitando todo riesgo para su integridad física. Pese a que Andrés considera que Corominas realizó una "acción alevosa", evita hablar, por el momento, de asesinato. Hoy entrega su informe de alegaciones al Juzgado de Instrucción número 4 de Manresa.

El abogado reiteró ayer su convencimiento de que el vigilante de seguridad "no actuó en legítima defensa" durante el asalto de cuatro presuntos ladrones al domicilio de la familia de joyeros Tous. Los hechos ocurrieron el pasado 9 de diciembre en Sant Fruitós de Bages. Corominas recibió el aviso de que unos intrusos merodeaban por la vivienda. El yerno de los Tous se dirigió, pistola en mano y protegido por un chaleco antibalas, hacia el coche donde se encontraban dos de los cuatro supuesto ladrones.

Uno de los disparos, realizado a quemarropa, alcanzó en el cráneo al conductor del automóvil, el albanokosovar Gazmend Sinani, que falleció dos días después. Corominas disparó otro tiro que, a juicio del abogado, pudo acabar con la vida del copiloto, Kasum Dulkhai. Al igual que el vigilante, Dulkhai permanece ingresado en prisión.

En su declaración ante el juzgado, Corominas dijo que el conductor llevaba una pistola. La policía no ha encontrado ninguna arma en el vehículo. El vigilante también explicó que se dirigió al coche para alertar a sus ocupantes de que se marchasen, ya que había unos ladrones en la zona. "Pero desde que [Corominas] frena hasta que dispara pasan sólo unos segundos. ¿Cómo puede ser que mantuviera una conversación?", reflexionó Andrés.

Según el abogado, Corominas no actuó de forma pasiva, sino que realizó una "acción ofensiva". "Protegido y armado, se dirigió a toda velocidad hacia el coche". El letrado también cuestionó el arrepentimiento del vigilante. "Su actitud no lo demuestra; va dando explicaciones que tienden a exculparle".